El “General” Gustavo Machado, por Simón Boccanegra

Gustavo Machado es el cuadragésimo quinto personaje venezolano biografiado en el magnífico esfuerzo editorial que adelantan entre El Nacional y el Banco del Caribe. Es el periodista Manuel Felipe Sierra quien con mucha solvencia nos retrotrae a los tiempos en que el «General» Gustavo Machado hizo una parte de la historia contemporánea del país. «General» le decíamos con enorme cariño a ese condottierogaribaldino, que acompañó a Sandino en Nicaragua, peleó contra los «cristeros» en el México revolucionario de los veinte, tomó a Curazao, se apoderó de un barco e invadió a Venezuela en 1929 para enfrentar a Gómez arma en mano. Errabundo exiliado entre Cuba, México, Estados Unidos, firmó el acta constitutiva del Partido Comunista de Cuba en 1925, creó el PRV -quizás el primer partido venezolano moderno-, y más tarde estuvo entre los fundadores del PCV y fue tal vez el primer venezolano en conocer la Unión Soviética, tan temprano como en 1925. Nacido en cuna de oro, auténtico «amo del valle», este «caballero de fina estampa», apuesto hasta la exageración, de una bonhomía a prueba de bombas y dueño de una inteligencia irónica, que jamás hería, el «General» Gustavo Machado dedicó su vida entera a la causa de los humildes. Sólo muy tarde en su vida fue alcanzado por los debates que cuestionaron el modelo y la práctica soviética y, como era relativamente lógico, estuvo en desacuerdo con esos puntos de vista, pero los discutió desde la altura de su talante tolerante y democrático. En fin, para quienes lo queríamos, Gustavo estuvo siempre más allá de los desencuentros que nos separaron y su casa jamás cerró la puerta a quienes nos fuimos del PCV pero no de su cordialidad y de su amistad.