El gobierno anterior, por Teodoro Petkoff
Qué problemón se ha vuelto tanto para Yo-El-Supremo como para sus paniaguados el que ya no haya «gobierno anterior». Ya no hay a quien echarle la culpa. El de Chacumbele está terminando su segundo «gobierno anterior». Diez años de mal gobierno ya no pueden ser justificados como «herencia de la Cuarta República». Diez años después ya no hay «Cuarta República» a la cual responsabilizar del actual desastre.
En lo de los apagones no hay que buscarle cinco patas al gato ni hay que ser «experto» para percibir que la causa de las repetidas fallas reside en lo que genéricamente puede ser denominado déficit de mantenimiento.
¿Qué antes de Chávez la estatal Cadafe era una birria? Nadie lo discute. Antes, en el interior del país vivían de apagón en apagón.
Lo grave es que diez años después la situación está peor.
En cambio, antes de Chávez, Edelca era un modelo de empresa estatal eficiente. Pero le cayó encima la marabunta corrupta e incompetente roja-rojita y ahora da lástima.
En Caracas, la empresa eléctrica privada proporcionaba un servicio casi impecable. Estatizada, ya estamos viendo lo que para los caraqueños, a diferencia de los habitantes del resto del país, era muy ocasional: los apagones. En menos de un año, la «eficiencia» roja-rojita se ha encargado de ir emparejando el servicio eléctrico en la capital con el del resto del país. Emparejando por abajo, desde luego.
Este es el meollo del asunto en relación con la estatizaciones.
Los turistas revolucionarios que por aquí se dan una vuelta ven en las estatizaciones una demostración de «cambio revolucionario». Para los venezolanos, sin embargo, el punto de vista es otro.
Toda la vida hemos sabido de un Estado patrono y gran capitalista. Nunca vimos en eso una revolución. Ni siquiera las nacionalizaciones del petróleo y del hierro movieron resortes épicos.
Pero, infortunadamente, sabemos muy bien que, con raras excepciones, las empresas estatales han sido espantosos focos de corrupción y han estado muy mal manejadas.
Con la Cantv estatizada nuestro problema no es enorgullecernos de que esa «área estratégica» ya no está en manos extranjeras sino saber si su servicio volverá a ser tan malo como lo era hasta 1991, cuando también la inefable «área estratégica» estaba en manos del Estado. Igual con la electricidad en Caracas. La cuestión no es que esa «área», también «estratégica», se la quitamos al imperio. El punto es si su servicio será tan deficiente como en el interior del país, donde el «área estratégica» es desde siempre estatal. ¿Cuánto faltará para que, después de comprar las cementeras, se presente escasez de cemento? En Sidor se aprecian ya los primeros signos del retorno de los viejos tiempos, cuando esa «área estratégica» también estaba en manos del Estado.
De esto no debe concluirse que la empresa estatal es por definición corrupta e ineficiente.
Pdvsa fue un modelo de correcta administración.
También Edelca y el Metro de Caracas. La condición estatal no niega per se la buena gerencia. Pero depende de los gerentes. Esta manga de ladrones e incompetentes es garantía de fracaso.