El ‘rejuvenecimiento’ de los equipos multidisciplinarios, por David Somoza Mosquera

Twitter: @DavidParedes861
El contexto actual si bien no está exento de incertidumbre, aunque cada vez más se disipen las alarmas que se activaron por la pandemia del covid-19, ha hecho que las empresas también recurran a estrategias que han probado ser exitosas en el pasado y las incluyan en el plan para repotenciar los negocios.
Actualmente se habla mucho de los equipos multidisciplinares y es porque las compañías cada vez más recurren a esta modalidad de trabajo para resolver problemas o realizar proyectos concretos de manera más eficaz. Ciertamente no es una fórmula nueva, pero sí se le está dando mayor relevancia.
Los negocios que adoptan los equipos multidisciplinarios tienen, sin duda alguna, una ventaja competitiva frente a otros que aún no lo han considerado. Se está demostrando constantemente que este rejuvenecido enfoque obtiene mayores ventajas y beneficios que el unidisciplinar.
La razón es sencilla: disponer de diferentes perspectivas cuando se trabaja en equipo resulta mucho más ventajoso, especialmente en determinadas materias o proyectos, ya que se abordan bajo todos los prismas. La lista de beneficios de esta modalidad es amplia, pero solo mencionaremos algunas para ilustrar nuestro punto.
Entre las ventajas destacamos las siguientes: los líderes naturales salen a relucir, gestionando los equipos de manera eficaz; la diversidad de puntos de vista permite anticipar diferentes situaciones y tomar mejores decisiones; se crean sinergias entre los miembros del equipo que enriquecen las soluciones y el propio trabajo; hay mayor rendimiento de las competencias individuales; favorece la aparición de nuevas ideas en un trabajo que resulta enriquecedor y productivo; y mejora el resultado final, al optimizar los recursos durante el proceso.
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Inicialmente esta forma de trabajar en equipo se basaba en la unión de diferentes disciplinas en un mismo grupo. Sin embargo, en la actualidad ese concepto se ha ampliado y además de la multidisciplinariedad, hoy en día se habla de equipos diversos, en los que no solo se tiene en cuenta la profesión de las personas, sino también otras características como el género, la edad, los gustos e incluso algunos rasgos de la personalidad.
Considerar las variables mencionadas anteriormente es clave, pues condicionan el trabajo en equipo y si son bien seleccionadas pueden dar resultados maravillosos.
Contar con equipos en los que aparezcan determinadas características como el género o la edad permite ver las cosas desde, por ejemplo, la perspectiva de los hombres o de las mujeres, de los jóvenes o mayores, y así entenderlas con mayor claridad.
El objetivo de este engranaje es unir a profesionales de distintas carreras, experticias, experiencias laborales y características personales en torno a un proyecto o a una solución específica. En otras palabras, a pesar de las diferencias entre los integrantes, el propósito es lograr alcanzar los objetivos trazados a través de un esfuerzo conjunto.
Poner a funcionar armónicamente un equipo multidisciplinario ha sido –y aún lo sigue siendo– el gran reto de las compañías y más en esta época que un paso en falso puede resultar ‘costoso’ para el negocio. Así que cualquier iniciativa que repotencie a la empresa es siempre bienvenida, independientemente de los desafíos que plantee.
David Somoza es especialista en temas de negocios y manejo de capital humano.
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