• Noticias
  • A Fondo
  • Lo Nuestro
  • Opinión
  • Migrantes
  • Regiones
  • EEUU
  • Alianzas
    • Alianza Rebelde Investiga
    • #LaHoradeVenezuela
  • Videos
    • Multimedia
    • La República que Tortura
      • Documental en Youtube
  • Nosotros
    • Principios editoriales
    • Manual de estilo
    • Nuestra historia
    • Editoriales
    • Teodoro
  • Noticias
  • A Fondo
  • Lo Nuestro
  • Opinión
  • Migrantes
  • Regiones
  • EEUU
  • Alianzas
    • Alianza Rebelde Investiga
    • #LaHoradeVenezuela
  • Videos
    • Multimedia
    • La República que Tortura
      • Documental en Youtube
  • Nosotros
    • Principios editoriales
    • Manual de estilo
    • Nuestra historia
    • Editoriales
    • Teodoro

El trabajo de desmontar una manipulación, por Carolina Gómez-Ávila



0
Comparte
  • Compartir en Facebook
  • Tuitealo

MANIPULACIÓN.
FacebookTwitterWhatsAppTelegramEmail
Carolina Gómez Ávila | @cgomezavila | febrero 22, 2020

@cgomezavila


Si reconocer una manipulación no es simple, desmontarla está en un nivel superior. Claro que todo dependerá del tema porque no es lo mismo una falacia superficial que una construida a partir de la lectura que se haga de un estudio matemático complejo.

Las interpretaciones son flexibles y allí caben las falacias que, como algunos dicen de las desgracias, no suelen venir solas. Así que puede que en mi planteamiento usted logre identificar un sofisma, pero a lo mejor no ve que está acompañado de un argumento de autoridad o de alguna otra afirmación engañosa. Pongamos un ejemplo:

Me encuentro con usted y abro la conversación anunciándole que le diré algo que “es una verdad como un templo”. Usted quizás sonría, pero ya apelé a su irracionalidad religiosa para bañar lo que sea que le diga a continuación con lo que usted entienda como infalible, superior y venerable aunque se considere ateo.

De inmediato le suelto que “la mayoría” rechaza alguna cosa. Una mayoría que sólo yo manejo porque hice el estudio estadístico y usted no podrá rebatírmelo. Tendrá que admitir que sólo yo conozco los estándares utilizados para asegurarle que millones creen lo que yo concluí,  luego de encuestar a unos pocos cientos de personas. 

Por cierto, no solo no le revelo las cifras y el método tampoco la batería de preguntas que hice así que usted no tendrá idea de si hubo sesgo en ellas ni quién pagó el estudio ni si en la contratación está incluida alguna complacencia. Y esto último lo digo por si es verdad aquel lugar común según el cual “los números que usted ve los ve porque alguien quería que los viera”.

Pero sigamos. Ese algo que es una verdad como un templo y a lo que ya he adjudicado la aprobación de la mayoría es el rechazo a una idea que no es simple. No es lo mismo que yo le diga a usted que es una verdad como un templo que la mayoría rechaza la ropa verde a que le diga que es una verdad como un templo que la mayoría rechaza la ropa verde que es responsable de la epidemia de coronavirus.

Imagine esta pregunta en una encuesta: “¿Rechaza usted las sanciones que afectan su vida?”. En fracciones de segundo, usted repasará el sufrimiento de su vida y, sin saber si ese sufrimiento es por culpa de las sanciones o no, responderá que sí, plenamente convencido.

Me parece que usted no respondió una pregunta, más bien creo que le implanté una idea y que, en la urgencia de contestar, no pudo reaccionar: “¿Las sanciones afectan mi vida?”, “¿No era el gobierno incompetente y corrupto que está al margen de la Constitución quien la afecta?”, “¿De qué habla usted si yo no estoy sancionado?!”, “Perdone, pero no entiendo cuánto de lo que dice es una pregunta y cuánto una afirmación que desconozco o no comparto”.

Y aquí no acaba la cosa porque le digo además que cuando alguien le ofrece un pañuelo verde que lo va a enfermar sin posibilidad de curación, usted debe alejarlo de su vida y no verlo nunca más. Así, asocié la desdichada oferta con el destino que a mí me da la gana que tenga quien la hizo.

Lee también: Rehenes, por Carolina Gómez Ávila

Si esto no es suficientemente grave, cierro asegurándole que ese acto comprometerá dramáticamente su futuro. O sea, le hago odiar a quien defienda unas sanciones que usted rechaza, porque ya le metí en la cabeza que son las responsables de sus problemas y le he dicho que eso es una verdad como un templo sin importar los análisis que usted haga.

En dos platos, lo traté como si fuera imbécil, que lo somos todos si no tenemos la paciencia y el sentido común de leer y desglosar lo que cualquiera, afincado en su pequeña parcela de poder y prestigio, nos suelte a mansalva en un tuit.

Post Views: 3.600
FacebookTwitterWhatsAppTelegramEmail
0
Comparte
  • Compartir en Facebook
  • Tuitealo

Carolina Gómez ÁvilaManipulaciónOpiniónSanciones


  • Noticias relacionadas

    • Güicho y la educación financiera, por Tulio Ramírez
      diciembre 1, 2025
    • COP30: ideas con antiguas visiones del financiamiento climático, por Leonardo E. Stanley
      diciembre 1, 2025
    • Hablemos del 38, por Gisela Ortega
      diciembre 1, 2025
    • Trump sin retorno, por Gregorio Salazar
      noviembre 30, 2025
    • “El sueño” de Frida Kahlo, por Valentina Rodríguez
      noviembre 30, 2025

  • Noticias recientes

    • Presidente de Colombia ofrece a Cartagena como sede para posible diálogo Venezuela-EEUU
    • Observatorio sindical denuncia detención del presidente de Fetraconstrucción
    • INAC restringe vuelos civiles al sur del país tras nueva alerta de Estados Unidos
    • "Todo depende de Maduro": familias de colombianos detenidos esperan su liberación
    • CPI cierra oficina en Caracas, pero mantiene investigación de crímenes de lesa humanidad

También te puede interesar

Andrés Bello: entendió que sin educación no hay república, por Stalin González
noviembre 30, 2025
Pequeña crónica diaria de un médico católico, por Gustavo J. Villasmil Prieto
noviembre 29, 2025
Honduras: ¿democracia en la cuerda floja?, por Cecilia Graciela Rodríguez Balmaceda
noviembre 29, 2025
La cincuentenaria coral Johnny Gómez de Duaca, por Alexander Cambero
noviembre 29, 2025
  • Portal venezolano fundado por Teodoro Petkoff, comprometido con la verdad, ejerciendo la libertad de expresión. 25 años ofreciendo actualidad informativa, reportajes, investigaciones, análisis y opinión. Un producto de Editorial La Mosca Analfabeta.

  • Contacto: [email protected]

    Síguenos
  • Noticias

    • Presidente de Colombia ofrece a Cartagena como sede...
      diciembre 1, 2025
    • Observatorio sindical denuncia detención del presidente...
      diciembre 1, 2025
    • INAC restringe vuelos civiles al sur del país tras...
      diciembre 1, 2025

  • A Fondo

    • Niñez migrante en medio de conflicto en Colombia:...
      noviembre 30, 2025
    • Comedores populares resisten frente al hambre persistente...
      noviembre 25, 2025
    • Comando para la Defensa Integral: otra estructura para...
      noviembre 24, 2025

  • Opinión

    • Güicho y la educación financiera, por Tulio Ramírez
      diciembre 1, 2025
    • COP30: ideas con antiguas visiones del financiamiento...
      diciembre 1, 2025
    • Hablemos del 38, por Gisela Ortega
      diciembre 1, 2025


Diseñado y Desarrollado por Binaural
  • Noticias
  • A Fondo
  • Lo Nuestro
  • Opinión
  • Migrantes
  • Regiones
  • EEUU
  • Alianzas
    • Alianza Rebelde Investiga
    • #LaHoradeVenezuela
  • Videos
    • Multimedia
    • La República que Tortura
      • Documental en Youtube
  • Nosotros
    • Principios editoriales
    • Manual de estilo
    • Nuestra historia
    • Editoriales
    • Teodoro
Presione enter para comenzar su búsqueda