Las impresiones sobre el “atentado” a Nicolás Maduro están cruzadas
Varios sexagenarios prefirieron no hablar del suceso, otros avalan la versión oficial, mientras que para algunos se trata de «una farsa» que busca distraer a la población de los problemas que los quejan
Casi 48 horas han transcurrido desde que se conoció el presunto atentado contra el mandatario Nicolás Maduro ocurrido en la avenida Bolívar de Caracas. Tras la noticia, la incredulidad corrió como pólvora entre los ciudadanos. Los murmullos en el transporte subterráneo la mañana de este lunes 8 de agosto se sostienen en una tesis de auto agresión, sin embargo, en el centro de la ciudad, donde se concentra la mayor cantidad de adeptos al gobierno, se cree a ciegas en la versión oficial y se pide “mano dura”.
“Eso es un hecho grave, los que están detrás de eso que se atengan porque lo que le viene es fuerte. Yo le pido al presidente Maduro que se afinque bien, de verdad mano dura contra esos terroristas, que deje la mano ya suave. Se lo pido como venezolano que soy y como chavista que soy: que tranque esa frontera con Colombia porque ese presidente que viene es peor terrorista que el que está ahorita”, manifestó Rafael González en entrevista a Talcual en las inmediaciones de la Plaza Bolívar.
De acuerdo a información oficial, hasta ahora hay seis personas detenidas por presuntamente estar implicadas en el “atentado”, perpetrado con un par de drones que iban cargados con C4. El fiscal general designado por la Asamblea Constituyente, Tarek William Saab, se refirió este lunes a los hechos, afirmando que se maneja como un magnicidio, pues lo que buscaba era atentar contra la vida del mandatario nacional.
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A juicio de Yorman Vásquez, habitante del centro caraqueño, el gobierno “tuvo un poco de descuido” al no advertir los aparatos. Señaló que se debe reforzar la seguridad debido a que en un incidente de este tipo no solo estaría en riesgo la vida del gobernante sino también la de “muchísima gente”.
Tres hombres trabajadores del sector público que prefirieron mantenerse en anonimato, coincidieron en que el incidente “es una farsa”, para que la gente olvide “la tragedia” que viven por la falta de alimentos, medicinas y servicios. En ese sentido, señalaron que con esto el gobierno busca opacar las protestas de trabajadores que se han generado en los últimos meses, entre ellas las del gremio de enfermeras, unas de las más representativas. Asimismo, uno de los entrevistados duda que se haya usado un kilo de C4, como manejan las autoridades. “Si eso es así hubiese explotado todo ese edificio”.
Por su parte, Dayra Rivas, militante del Movimiento Revolucionario Tupamaro, dijo a TalCual que rechazan el atentado, al tiempo que aseguró que este lleva bastante tiempo. “Desde la llegada del presidente Hugo Chávez al poder” en 1998. “Ha sido un atentado paulatino bastante cruel, impulsado por el imperio norteamericano y sus aliados”, añadió.
“Eso es un montaje para mí. Nosotros no tenemos necesidad ni siquiera de preocuparnos por eso porque para mí eso es nada, quien quiera matar al presidente viene directamente y realmente lo mata y listo”, dijo tajante un hombre de unos sesenta años cerca de la Plaza El Venezolano.
Mientras que el gobierno intenta cerrar el caso presidencial, la población parece haberlo echado ya por tierra. Es tal la magnitud de la crisis que aqueja a la población, que por ahora, los venezolanos parecen pensar solo en hallar algo de dinero para comer, en los hipertensivos que escasean o en el transporte y el agua que no llegan.