En el CNE está la cosa, por Simón Boccanegra
Hay que tener clara una cosa: en este momento, la elección del CNE es lo más importante que tiene el país ante sí. Sin CNE no hay referéndum revocatorio. La Asamblea Nacional tiene plazo hasta el próximo jueves 15 de mayo para realizar los nombramientos de sus integrantes. Desde luego, tiene que ser un organismo equilibrado, para que sea confiable para las partes. En principio, en la AN, donde ninguna parte por si sola tiene los 2/3 de votos necesarios para hacer la elección, elegir 14 de los 15 miembros del organismo (5 principales y 10 suplentes) no debería ofrecer mayor dificultad. Cada lado propone “sus” siete (cinco suplentes y dos principales) y ambos sectores los votan. El décimo quinto, es decir, el quinto principal, sería la piedra de tranca. El problema no es que sea químicamente puro, sin sesgo político alguno, porque ese espécimen no existe hoy en Venezuela, sino alguien cuya integridad personal garantice que no se prestará para ninguna marramucia. Ni el Gobierno ni la oposición pueden aspirar a que ese quinto personaje sea un incondicional de cualquiera de ellos, porque así el juego se tranca. Si este escollo es sorteado, nada podrá impedir la celebración del revocatorio.
