En el Día Internacional del Cooperativismo, por Oscar Bastidas Delgado
¡Con el orgullo de ser cooperativista!
Foto: Billiken
Sin dudas, las cooperativas y su movimiento, se expresen a niveles locales, nacionales o el mundial, juegan papeles importantes en las soluciones a problemas de toda índole por parte de quienes deciden enfrentarlos con sus propios recursos y esfuerzos sin esperar intermediaciones de «mecenas» gobernantes o representantes de iglesias, partidos políticos, sindicatos u otros.
Sin conocerlas, es imposible dictaminar la realidad de numerosas sociedades, incluyendo aquellas con obvio dominio de relaciones capitalistas. Lamentablemente ellas son pocos visibles ante los ojos del común por desconsideraciones de los gobiernos, de «impulsores de desarrollos» y de sus propios asociados que deben hacer esfuerzos para que sus cifras y aportes figuren en los sistemas de cuentas nacionales.
Diversas experiencias muestran como ellas enfrentan en sus ámbitos lo que sus asociados desean para sus sociedades y el planeta mismo, ellas son muestras de cómo impactar las áreas de la calidad de vida consideradas por la ONU: salud, alimentación, educación, vestido, ocupación y condiciones de trabajo, condiciones de vivienda, seguridad social, y derechos humanos.
También son demostrativas de cómo enfrentar las múltiples necesidades de la constitución y sostenimiento de una ciudad gracias a su arsenal de actividades para construirlas y mantenerlas con condiciones ambientales aceptables. Su presencia, vigencia y necesidad de impulsarlas no está en discusión. Según el World Co-Operative Monitor (ACI, 2021), para el año 2021 más del 12 % de la población mundial era cooperativista gracias a 3 millones de cooperativas y proporcionaban oportunidades de trabajo al 10% de la población; destaca que las 300 empresas cooperativas y mutuales más importantes del mundo sumaban un volumen de negocio de 2,14 billones de dólares, monto superior al PIB de numerosos países.
Un pequeño panorama ilustra esta afirmación. 1.- El principal sistema financiero en Alemania es cooperativo: el Banco Raiffensen, además, en ese país no existe un solo productor agrícola no relacionado al menos con una cooperativa; 2.- el principal financiero de Francia es el Credit Agricol, aportante del 25% de los créditos agrícolas; 3.- Japón, con sus 42.000 cooperativas con 570.000 empleados y 105.000.000 millones de miembros , cerca del 80% de la población, tiene clínicas cooperativas que atienden casi el 20% de la población y un banco cooperativo centenario, el Norinchukin Bank que con ley propia es a la vez la organización a nivel nacional de Central Cooperative Bank for Agriculture and Forestry y un inversor institucional con papel importante en los mercados financieros
Continúan: 4.- en Israel son los kibutz los que marcan la pauta productiva pues con el 5% de la población producen el 30% del de la producción agrícola del país y multiples beneficios en lácteos, industria metalúrgica y turismo; 5.- en Suecia una de cada cuatro familias vive en cooperativas de vivienda; 6.- en los países nórdicos entre el 80 y el 100 de la producción agrícola se relaciona con cooperativas; 7.- la Corporación Mondragón en el País Vasco marca el baremo salarial de su región con un promedio superior al de España.
Otras: 8.- en Barcelona, España, el hospital de la ciudad es propiedad y gestionado por la cooperativa Instal·lacions Assistencials Sanitàries (SCIAS), integrada por 164,000 usuarios y 800 trabajadores fundaron con el objetivo de que sus asociados ejerzan su condición de legítimos protagonistas en la asistencia sanitaria; 9.- uno de cada cuatro estadounidenses ahorra en cooperativas de ahorro y crédito (credits unions) y el 51% de la electricidad de ese país es gracias a cooperativas; y 10.- en Canadá el porcentaje de electrificación es parecido al de USA y en cuanto a ahorros, solo en la provincia de Quebec el 65% de la población lo hace en las centenarias Cajas del Movimiento de Cajas Populares y de Economía Desjardins.
Casos latinoamericanos: 1.- en Cuba el 90% de los productos agrícolas de sus mesas son producidos por cooperativas; 2.- en República Dominicana 2.169 cooperativas generan unos 80.000 puestos de trabajo e impacta cerca del 40% de la Población Económicamente Activa (PEA); 3.- en Costa Rica destaca por sus cooperativas autogestionarias de salud, las agrícolas con sus productos inorgánicos y el alto peso del ahorro y el crédito; 4.- en Colombia son innumerables los impactos, solo la red financiera asocia a cuatro de los 6,3 millones colombianos, en el ámbito de la salud destacan diversas cooperativas y mutuales y en el 2019 ocho empresas de origen cooperativo o mutual figuraron entre las 100 empresas con mayores ingresos operacionales, allí el cooperativismo de salud y el mutualismo tienen destacada presencia
Siguen: 5.- en Argentina las cooperativas están presente en una amplia gama de actividades que incluye urbanismo, electricidad, agua, y en interesante proceso de Empresas Recuperadas por los Trabajadores (ERT), allí las Cooperativas de Servicios Públicos asumen importantes roles; 6.- en Uruguay, la Federación Uruguaya de Cooperativas de Viviendas por Ayuda Mutua (Fucvam), con sus 54 años de trayectoria y sus 750 cooperativas afiliadas, es referencia mundial de construcción de 35.000 viviendas de propiedad colectiva destinadas a trabajadores y trabajadoras de renta media y baja bajo los principios de ayuda mutua, autogestión, democracia directa y propiedad colectiva.
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Las acciones del cooperativismo se establecen sobre cuatro razones con altas incidencias : 1.- su ética como sinergia de valores y principios orientadora de sus acciones cotidianas alineadas con el concepto de sostenibilidad en sus tres ámbitos de acción: económico, social y medioambiental; 2.- el alto peso del Trabajo Decente que genera que, per se, concede estabilidad laboral e ingresos apropiados a sus asociados como copropietarios – trabajadores de ellas; 3.- su alta vinculación a lo local gracias al doble anclaje socio – económico por su doble dimensión Asociación – Empresa; y 4.- su capacidad de aumento progresivo de impactos y extensión territorial gracias a la intercooperación e integración mediante centrales, uniones, federaciones, confederaciones y otras fórmulas que les permite abarcar mayores territorios, sumar asociados y comunidades con importantes economías de escala apuntando consustancialmente, de manera natural si se quiere, a la propuesta del Desarrollo Humano.
Compañeras y compañeros cooperativistas, ¡qué grande es sentirse parte de este movimiento mundial en este nuevo Día Internacional del Cooperativismo! Sintámonos orgullosos de pertenecer a este movimiento con historia propia y reales impactos. Recordemos que con cooperativas se pueden enfrentar todos los problemas y realizar cualquier actividad humana menos esclavizar y explotar personas.
Oscar Bastidas es cooperativista, consultor y facilitador en Emprendimiento Asociativo y Microempresas.
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