En hospitales del interior del país el desabastecimiento alcanza a 90%
Los hospitales más desabastecidos se encuentran en los estados Trujillo, Mérida, Amazonas, Cojedes, Barinas y Monagas y sus porcentajes de desabastecimiento oscilan entre 80% y 90%
La Encuesta Nacional de Hospitales, realizada por la Red Médicos por la Salud, se enfocó en los factores de abastecimiento en las unidades críticas de emergencia y quirófanos, en el funcionamiento general de los servicios desde noviembre de 2018 hasta julio de 2019.
En este período de tiempo, lo más importante de la medición fueron los eventos nunca antes vistos en el país: los apagones que aún continúan en el país y el ingreso de ayuda humanitaria.
Una de las variables en las que se enfocó la encuesta fue la dotación de insumos y medicamentos en las unidades críticas. El índice de desabastecimiento se mide con en base en la existencia o no de 20 insumos básicos en emergencia y 11 en quirófano.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Hospitales, en los meses monitoreados evidenciaron “una leve mejoría en cuanto al desabastecimiento en emergencias”.
Para noviembre de 2018 el desabastecimiento se encontraba en 49,7% y en julio de 2019 era de 43,3%; lo que indica una mejoría de 6,4%.
Sin embargo, uno de los elementos que más llamó la atención en esta encuesta fue la “normalización de la escasez”. A pesar de la leve mejora, la cifra de desabastecimiento ronda 50% desde hace seis meses; lo que significa que el “no hay” se convirtió en el funcionamiento normal de los hospitales de todo el país.
La mejoría se puede explicar por la distribución de los IEHK (Interagency Emergency Health Kit) entregados por organizaciones como la Cruz Roja y Media Luna Roja y distintas agencias de la ONU a los hospitales como ayuda humanitaria.
Esta encuesta no pudo verificar el impacto de la ayuda humanitaria enviada desde Rusia y China por no haber información oficial sobre estas entregas.
Los hospitales más desabastecidos se encuentran en los estados Trujillo, Mérida, Amazonas, Cojedes, Barinas y Monagas y sus porcentajes de desabastecimiento oscilan entre 80 y 90%. Esto significa que la escasez crónica debe ser suplida por el propio paciente o por sus familiares.
Los más abastecidos, a excepción del Hospital Patrocinio Peñuela de San Cristóbal, estado Táchira, están todos en Caracas. En estos centros el desabastecimiento se ubica entre 8 y 28%.
Operatividad de quirófanos y camas de emergencia
La Encuesta Nacional de Hospitales encontró que la operatividad de los quirófanos se mantiene estable alrededor de cinco salas por hospital, exceptuando los meses de marzo y abril, donde los apagones hicieron que la operatividad bajara a dos salas por centro. Luego, ascendió a ocho quirófanos por hospital.
Entonces, se puede concluir que la operatividad de los quirófanos no depende directamente del desabastecimiento, sino al funcionamiento de los servicios públicos.
La operatividad de las camas de emergencia también tuvo una leve mejoría, concordante con el descenso en los niveles de desabastecimiento en este servicio; directamente relacionado con la entrada de ayuda humanitaria.
Situación del agua y la energía eléctrica
Los niveles de recorte de los servicios públicos alcanzaron cifras históricas, más allá de los apagones para julio de 2019. La Encuesta Nacional de Hospitales encontró que el promedio semanal de horas sin servicio eléctrico fue de 6,8; siendo más largas las horas sin luz hacia el occidente del país.
El servicio de agua fue intermitente en 70,87% de los hospitales del país, mientras en 26,21% hubo agua todos los días y en 2,91% no hubo agua ningún día.
La Encuesta Nacional de Hospitales encontró que existe una correlación entre la falta de servicio eléctrico y el suministro de agua, siendo marzo, en ambos casos, el mes más crítico.
La Red Médicos por la Salud Nacional explica que “la situación de los servicios púbicos solo se habrá normalizado cuando los hospitales cuenten con agua y luz 365 días del año, siete días a la semana y 24 horas al día”.
Se pudieron evitar 4,4 muertes por semana
De acuerdo con la información proporcionada por los médicosm 4,4 muertes semanales se pudieron haber evitado si los servicios hubiesen funciondo de manera óptima o si hubiese habido todos los insumos.
Igualmente, la Red Nacional de Médicos por la Salud asegura que entre marzo y abril se registraron 32 muertes a causa de los apagones en todo el país.
La conclusión de la Encuesta Nacional de Hospitales es que a pesar de las leves mejorías, el desabastecimiento sigue teniendo un impacto negativo, con patrones regionales y hospitalario para el desabastecimiento de insumos como para las fallas eléctricas.
“Absolutamente ninguno de los indicadores muestra hospitales en condiciones normales, o al menos óptimas para la atención básica que debe brindar un centro de salud”, afirma la encuesta.