Esposa de Carlos Lanz califica su desaparición como un “secuestro político”
Aunque la esposa de Carlos Lanz consideran que está secuestrado, el Ministerio Público desestimó esta hipótesis porque las evidencias de las investigaciones no apuntan a este delito
El sociólogo Carlos Lanz desapareció de su casa, ubicada en Maracay, el pasado 7 de agosto. Ha transcurrido más de un mes y aún los organismos de seguridad no encuentran ni un indicio de dónde pudiera estar.
Su esposa, Mayi Cumare, dijo a TalCual que ese viernes salió a trabajar y Carlos quedó durmiendo; pero a mediodía, su hija la llamó y le notificó que él no estaba en la casa, situación que les extrañó porque aseguran que Lanz no salía solo de la casa y menos durante la cuarentena por la pandemia del coronavirus.
Cumare está convencida que la desaparición de Carlos Lanz “es un secuestro político”, y afirma que fue un caso “quirúrgicamente bien planificado” porque tras mes y medio de la desaparición no hay ningún rastro.
Mayi Cumare está segura de que su esposo salió de su casa con una persona de confianza y que “en el camino desvió el propósito que le plantearon para su salida”. Esta certeza la obtiene porque asevera que el sociólogo salió con ropa de vestir, con sus llaves, lentes, cartera y teléfono; además de que las puertas no fueron forzadas.
A pesar de que Cumare califica el caso de su esposo como rapto no tiene sospechas de quién pudiera estar detrás. “No tengo a nadie ubicado aunque uno se hace muchas hipótesis en el cerebro, pero nada contundente que pueda dar algún indicio”, expresa.
Asimismo, Mayi Cumare afirma que Carlos Lanz no tiene enemigos personales y que sus únicos adversarios pudieran ser los “enemigos de la revolución porque él se ha dedicado a investigar cómo el imperio y la derecha han venido dándoles golpes al gobierno”. Describe a su pareja como un hombre “pacífico, conciliador, mediador y no se mete con nadie”. Dice que además de su familia sanguínea tiene una familia política que lo acompaña, que está pendiente de su desaparición y que exige que lo liberen.
“Ya está bueno. ¿Hasta cuándo? ¿Qué buscan de una persona mayor? Realmente no tiene sentido tenerlo en cautiverio. Nosotros no tenemos recursos si es que aspiran cobrar rescate, cosa que no creemos porque ya lo hubiesen hecho. No contamos con nada. Somos unos simples asalariados. Libérenlo porque además es una persona con condición diabética que puede empeorar su salud”, suplica Mayi Cumare a quienes pudieran ser los responsables de la desaparición de Carlos Lanz.
Piden celeridad
Tarek William Saab, fiscal general designado por la constituyente, informó el pasado 15 de agosto que una comisión mixta del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), el Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) investigan la desaparición del también profesor y dirigente de izquierda.
Contrariamente a la convicción que tiene la esposa del profesor Carlos Lanz, Saab desestimó la hipótesis de secuestro por cuanto las evidencias de las investigaciones no apuntan a este delito. “Debo decir que nuestros fiscales en base a lo recabado se encuentran analizando otras hipótesis que son parte de la reserva legal y no puedo revelarlas”, manifestó el jefe del Ministerio Público.
Igualmente, Saab anunció que se realizaron una solicitud a Interpol Canadá para que emitiera una notificación amarilla por la desaparición del profesor Lanz con base en unas llamadas que ocurrieron días previos desde ese país.
En referencia a las investigaciones, dice que puede dar fe de que los organismos que llevan el caso están trabajando como corresponde. “El Ministerio Público nos está haciendo los interrogatorios a los familiares, el Cicpc está investigando, haciendo rastreo en diferentes sitios: urbanismos, zonas cercanas y lugares que pudiera frecuentar más, pero realmente es un caso atípico”, insiste.
No obstante, Cumare les pide a los organismos que llevan las investigaciones con celeridad, profundización, rastreo permanente y trabajo coordinado con el pueblo. “Pido que rastreemos y nos metamos casa por casa a buscar a Carlos Lanz hasta debajo de las piedras hasta dar con su paradero”.
Ha hablado frecuentemente con los funcionarios delegados para el caso: con el fiscal regional, con el nacional, con el equipo de trabajo del Ministerio Público; con Douglas Rico, director del Cicpc; y hasta con el ministro de Relaciones de Interiores, Justicia y Paz, Néstor Reverol; pero todos les han informado que no se encuentra ni una sola pista que pueda ayudar a encontrar al sociólogo.
La familia solicita a Nicolás Maduro que a esta investigación le dé “carácter de secuestro político y que ponga toda la infraestructura como Estado para buscarlo y encontrarlo”.
Citado por desaparición de Caros Lanz
El expresidente de la Comisión de Seguridad y Defensa de la Asamblea Nacional William Fariñas señaló que por la investigación sobre la desaparición de Carlos Lanz se solicitó una entrevista con el general de división Cesar Mejía Camacaro, por su cercanía con el sociólogo.
«Como saben César siempre fue cercano a Carlos Lanz, en todo lo concerniente a parte de estudios, investigaciones y conferencias que tenían que ver con la guerra de cuarta generación y los ataques de EEUU a Venezuela», dijo a través de un audio difundido.
El comandante de la aviación informó que el general de división Cesar Mejía Camacaro se encuentra desde hace 15 días en «calidad de invitado» en la sede de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) y «lo cierto y lamentable» es que en todo ese tiempo no han ofrecido ningún tipo de información a sus familiares.
«En nuestro carácter de militares de la gesta del 27 de noviembre, elevo esta situación de preocupación de que César Mejía Camacaro tiene 15 días incomunicado y no ha habido, por cortesía, una llamada de las autoridades», agregó.
Al mismo tiempo instó a las fuerzas de seguridad del país a apegarse al principio militar de atender a su personal. Esto sin desestimar las causas por las que César se mantiene en calidad de invitado en la sede de la Dgcim.
