Estudio de universidad sueca ubica a Venezuela entre los países con menos democracia
Venezuela ocupó la casilla 164, de un total de 179 países evaluados por el instituto V-Dem del departamento de ciencias políticas de la universidad de Gotemburg, para su informe anual sobre el estado de la democracia en el mundo. En 2019 el país ocupaba el puesto 158, lo que significa que en un año cayó seis puestos
El instituto V-Dem del departamento de ciencias políticas de la Universidad de Gotemburgo, Suecia, publicó su informe anual sobre el estado de la democracia en el mundo, donde Venezuela se ubicó entre los países menos democráticos.
De acuerdo al estudio, Venezuela entró en esta clasificación junto a China, Rusia, Siria, Libia y otros 20 países del Medio Oriente, África del Norte y África subsahariana.
*Lea también: Arreaza revisa programas de cooperación con el PNUD tras impasse con Bachelet
El país ocupó «la casilla 164, de un total de 179 países evaluados. En 2019 el país ocupaba el puesto 158, lo que significa que en un año cayó 6 puestos”, se precisó.
El país fue señalado como una las 63 autocracias electorales que identificó la investigación, hecha por el instituto V-Dem del departamento de ciencias políticas de la Universidad de Gotemburgo, identificadas en 2020.
Igualmente, alertó que el comportamiento del régimen de Nicolás Maduro, durante la pandemia ha incluido “medidas discriminatorias, imposición de las restricciones o cuarentena sin límite de tiempo, derogación de algunos derechos, aplicación abusiva de las leyes, campañas oficiales de desinformación y severas restricciones a los medios de comunicación”, reseñó el Centro de Comunicación Nacional.
En el informe se resaltó que entre las medidas autoritarias adoptadas por el gobierno de Maduro resaltaron los campos de concentración improvisados en los que obligaron a venezolanos que regresaban desde el extranjero a guardar cuarentena bajo el argumento de intentar frenar los contagios por coronavirus.
Se denunció en el documento que el régimen de Maduro discriminó a las personas que regresaban al país, tachándolos, durante transmisiones por televisión, como “bioterroristas” o “armas biológicas”.
Otro de los parámetros en los que Venezuela resaltó negativamente en todos los aspectos estudiados fue en la caída de la democracia en la última década: deliberación, participación, igualdad, elecciones y el componente liberal de sus instituciones.