Fiscal Saab pide a la CPI y la ONU investigar «crímenes» contra migrantes en El Salvador
Según el fiscal general Tarek William Saab, han logrado recabar 123 denuncias hechas por los repatriados y se hicieron 25 «reconocimientos médicos legales», donde se evidenciaron «lesiones físicas como golpes, moretones y quemaduras», así como experticias psiquiátricas. Andry Hernández, un maquillador oriundo del estado Táchira, denunció que fue abusado sexualmente por parte de unos custodios del Centro de Confinamiento al Terrorismo de El Salvador
El fiscal general de la República, Tarek William Saab, solicitó este lunes 21 a diversos organismos internacionales, entre ellos la Corte Penal Internacional y el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que investiguen los «crímenes de lesa humanidad» que, aseguró, cometió el Gobierno de El Salvador contra un grupo de migrantes venezolanos.
«Hago un llamado a la Corte Penal Internacional, al Consejo de Derechos Humanos de la ONU para que hagan lo mismo que estamos haciendo nosotros como Ministerio Público contra estos tres funcionarios (…) por estas agresiones que fueron diarias», indicó el fiscal en una rueda de prensa.
Saab dijo que el Ministerio Público inició una investigación contra el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, el ministro de justicia de ese país, Héctor Villatoro, y el director general de centros penales, Osiris Luna Meza, a quienes señaló por ser «responsables» de tortura, tratos crueles, desaparición forzada, privación ilegítima de libertad y asociación para delinquir en perjuicio de 252 migrantes venezolanos.
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Estos migrantes fueron canjeados por el Gobierno de Estados Unidos en una negociación con Nicolás Maduro, que también involucró la liberación de 10 ciudadanos estadounidenses y la excarcelación de 80 presos políticos. Fueron repatriados en dos vuelos directos la tarde del pasado viernes 18 de julio.
«Dejen de ser cómplices con personas que han degradado la dignidad humana en sus naciones, no solo contra sus connacionales como ocurre en El Salvador, sino contra personas de otras nacionalidades», reclamó Saab.
Testimonios de migrantes
Según el fiscal general, han logrado recabar 123 denuncias hechas por los repatriados y se hicieron 25 «reconocimientos médicos legales», donde se evidenciaron «lesiones físicas como golpes, moretones y quemaduras», así como experticias psiquiátricas «que detectaron afectaciones graves debido a la situación vivida, tales como diversos trastornos de estrés e ideaciones suicidas».
El funcionario insistió en que fueron «brutalmente secuestrados en una de las peores cárceles del planeta», al tiempo que mostró varios vídeos con testimonios de los migrantes.
Uno de los testimonio presentados por el fiscal fue el de Maiker Espinoza, padre de la niña Maikelys Espinoza, quien fue separada de sus padres y deportada tras varias semanas de reclamo de la administración Maduro.
«Nos torturaron de una manera muy brusca (…) ese lugar está incapacitado para tener seres humanos allí, gracias a Dios ya logramos salir de ese secuestro», expresó.
Andry Hernández, un reconocido maquillador del estado Táchira, dijo que sufrió diversas torturas, al igual que agresiones físicas y psicológicas.
«En mi caso particular fui abusado sexualmente por los funcionarios de El Salvador», afirmó el joven. Saab dijo que el maquillador les confesó que intentó suicidarse dos veces por la agresión reiterada de unos custodios.
Hernández agradeció a las autoridades por haber regresado «de mi patria, un lugar del que nunca debí salir (…) Nos creímos que nunca íbamos a volver a ver a nuestros familiares».
Por su parte, Charlie González relató que «desde que llegamos fue un trato inhumano que no se le da ni a un perro». Aseguró que recibió un impacto de bala en su ceja derecha «sin hacer, nada, solo porque estábamos reclamando nuestros derechos. Recibí un impacto de bala un lunes, y fui golpeado martes, miércoles, jueves, viernes y sábado. Todas las semanas nos golpeaban».
Edduin Torres también señaló que fue golpeado y maltratado. «Nos humillaron, nos accionaron con perdigones, me dislocaron la mandíbula».
Neri Suárez señaló que además de los maltratos, eran víctimas de aislamiento. «No nos daban acceso a una llamada, realmente lo que pasamos allá no se lo deseo a nadie (…) Antes de venirme me dieron una golpiza por simplemente bañarme».
«El 12 de mayo los oficiales a mí me sacaron una muela con un alicate de presión, me dieron con un perdigón en el pecho, me golpearon la cabeza», afirmó Suárez, quien también denunció que sufrió fracturas en una costilla y tiene molestias en uno de sus testículos debido a las golpizas.
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