Hace tres años la manipulación del voto quedó en evidencia, actas en mano
El 15 de octubre de 2017 hubo elecciones regionales en Venezuela, y en el estado Bolívar Andrés Velásquez comenzó una pelea porque respetaran el voto de quienes participaron. Tres días después se proclamó a Justo Noguera, del PSUV, como vencedor, a pesar de que las actas de las máquinas revelaban que los resultados fueron alterados
Se cumplen tres años desde que el mito del «mejor sistema electoral del mundo» se derrumbó. La elección de gobernador del estado Bolívar fue la primera en la que la automatización del voto mostró que el escrutinio en el país no era un problema de máquinas sino de voluntades humanas. Al candidato Andrés Velásquez le robaron las elecciones, modificando las cantidades de sufragios obtenidos por él y por su contrincante, el chavista Justo Noguera Pietri, en los datos enviados a la sede central del Consejo Nacional Electoral en Caracas.
El fraude estuvo en la Junta Regional, que modificó los datos arrojados por las máquinas y alteró los resultados. Tres días después de la votación fue que el CNE anunció que el candidato del PSUV había ganado con 276.655 votos, frente al voto de 275.184 electores que apoyaron al abanderado opositor. Pero no contaban con que Velásquez pudiera recoger y mostrar las actas impresas por las máquinas que demostraban las inconsistencias numéricas.
Ya Bolívar era una mina de corrupción con Francisco Rangel Gómez a la cabeza de la gestión regional, las empresas básicas eran caldo de cultivo para la conflictividad obrera y comenzaba a operar el Arco Minero del Orinoco. Mantener el control en ese territorio era clave para el oficialismo.
Tres años después, Andrés Velásquez afirma que “el 15 de octubre de 2017, no sólo ganamos la elección a Gobernador del Estado, sino que actas originales en mano pudimos probarlo, y así lo hicimos, acudimos a todas las instancias nacionales para demostrar que se habían alterado los resultados porque las actas arrojadas por su sistema electoral automatizado y puesto ante el mundo como ‘infalible’ y ‘transparente’ no resistió las pruebas (actas originales) que presentamos para demostrar que los resultados habían sido alterados de forma manual para favorecer al usurpador de la Gobernación de Bolívar”.
La cuenta de Twitter que usaba Velásquez y con la cual mostró las actas que demostraban aquel fraude fue suspendida. Afortunadamente, aún están en la red las pruebas que divulgó el diputado Enrique Márquez.
Aca va la primera prueba del fraude en Bolivar. En esta mesa del Municipio Cedeño le suben al candidato del PSUV de 138 votos a 440 votos!!! pic.twitter.com/pBvmgtBjbV
— Enrique Márquez (@ENRIQUEMARQUEZP) October 18, 2017
En esta acta de la parroquia Barceloneta, el CNE le regala 255 votos al candidato de Maduro. Con acta en mano los agarramos infraganti pic.twitter.com/NFeyo76Unv
— Enrique Márquez (@ENRIQUEMARQUEZP) October 19, 2017
Esta acta es d Municipio Cedeño. Los «santicos» del CNE Bolívar le agregaron 153 votos al candidato d Maduro violando la voluntad del pueblo pic.twitter.com/hgXiUuuDjh
— Enrique Márquez (@ENRIQUEMARQUEZP) October 19, 2017
Sigamos con las pruebas. En esta acta le quitan a Andrés Velázquez 9 votos y le suman 52 al oficialista. Fraude evidente!! pic.twitter.com/P5wLF1745H
— Enrique Márquez (@ENRIQUEMARQUEZP) October 19, 2017
En esta otra acta le tumban 79 votos a Andrés Velázquez y le agregan 189 votos al candidato del PSUV pic.twitter.com/vIoybAnD6J
— Enrique Márquez (@ENRIQUEMARQUEZP) October 18, 2017
En esta otra acta el incremento para el PSUV es de 116 a 359 votos. Notese en la foto tanto el acta de la maquina como lo publicado por CNE pic.twitter.com/eXn3YFtcVg
— Enrique Márquez (@ENRIQUEMARQUEZP) October 18, 2017
En 2017 el sistema electoral automatizado demostró que la alteración manual era posible, pero deja trazas. Fue la confirmación de que tenía que ser fulminado, al dejar en evidencia las marramucias del poder. Recordemos que menos de tres meses antes, la propia empresa Smartmatic denunció que se alteraron los resultados de las elecciones a la asamblea constituyente de ese año.
Antonio Mugica, director general de Smartmatic, dijo a la prensa en Londres que hubo una discrepancia de un millón de votos entre las cifras de participación anunciadas por el gobierno y las registradas por sus sistemas. «Lamentamos profundamente deber informar que las cifras de participación del domingo 30 de julio para la Asamblea Constituyente de Venezuela fueron alteradas», denunció entonces. Agregó: “No podemos garantizar resultados de la constituyente, creemos que la data para la elección fue manipulada”.
El CNE respondió excluyéndolos de las operaciones electorales en el país, y abriendo la puerta a lo que ocurrió con el voto en Bolívar en octubre y quién sabe si en otros lugares también donde no se consiguieron todas las actas para cotejar bien los resultados. Y así se llegó a 2020, cuando la autoridad electoral presentó nuevas máquinas, con mucha opacidad técnica, para sustituir por completo el complejo sistema de votación usado por más de una década.