El FMI prevé una mayor caída de la economía venezolana para este 2019
FMI reclaculó a la baja el repunte de América Latina, y estima que Venezuela vivirá una recesión más severa de lo esperado
El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé una “contracción aún más severa en Venezuela”, según informó la directora del organismo, Christine Lagarde, durante la presentación del informe Perspectivas de la Economía Mundial 2019 en el Foro Económico de Davos, Suiza.
Esto podría significar una caída superior al 10.000.000% del Producto Interno Bruto (PIB) estimado por el FMI para Venezuela durante el 2019, de acuerdo con el informe publicado en octubre pasado.
En el reporte presentado al Foro Económico Mundial, el organismo recalculó a la baja el repunte económico de América Latina en los próximos dos años: 2% en 2019 y 2,5% en 2020; en ambos años, 0,2 puntos porcentuales menos de lo previsto anteriormente.
Las revisiones se deben a perspectivas de menor crecimiento en México en 2019–20, por una disminución de la inversión privada, y una contracción aún más severa de lo previsto en Venezuela, señaló Lagarde.
El organismo financiero internacional informó que en las próximas semanas se reunirá su Consejo Ejecutivo para discutir la situación en Venezuela, cuyo Banco Central entregó a finales de 2018 los datos económicos que no publica desde 2015.
De acuerdo a la agencia Bloomberg, los datos aportados por el BCV señalan que el gobierno admitió que en 2017 la economía se contrajo 860% y la inflación escaló a 15,7%. Los diferentes sectores cayeron así: petrolero -15%, manufactura -25%, construcción -53% y banca y seguros -32%. Las importaciones públicas cayeron 27% y de 51% las privadas.
Por otra parte, el FMI prevé que la economía mundial crecerá menos de lo previsto en 2019 y 2020, señalando que la expansión global será de 3,5% este año y de 3,6% en 2020, una rebaja de dos y una décima, respectivamente, en comparación con los pronósticos de octubre.
Esto es producto del peor desempeño durante el tramo final de 2018, así como del deterioro de la confianza y sus implicaciones para el crecimiento ante los elevados niveles de deuda pública y privada.
Advirtió que una escalada de tensiones comerciales sigue siendo una fuente clave de riesgo para las perspectivas y constata un endurecimiento de las condiciones financieras.