Nuevos costos para registrar una empresa desaniman a cualquiera
Gremios afirman que ahora será más difícil y complicado invertir en el país por los exorbitantes montos fijados por el Servicio Autónomo de Registros y Notarías (Saren) para el registro y constitución de sociedades mercantiles, que entraron en vigencia el 3 de julio
Desde el pasado 3 de julio entraron en vigencia los nuevos montos mínimos fijados por el Servicio Autónomo de Registros y Notarías (Saren) para el registro y constitución de pequeñas, medianas y grandes empresas. El ente, adscrito al ministerio de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, asegura que busca “lograr la simplificación, optimización y racionalización de los trámites que conllevan mencionados trámites”.
Sin embargo, la medida tomada por el gobierno de Nicolás Maduro está lejos de facilitar la constitución de nuevas empresas o llevar al sector formal la gran cantidad de negocios informales que existen, de acuerdo con la Cámara de Comercio de Maracaibo. Advierte que “será más difícil y complicado invertir en el país” tras los incrementos exorbitantes.
El abogado tributarista Leonardo Palacios considera que es “absurdo” que la administración de Maduro estableciera prácticamente una tasa para cada tipo de sociedad mercantil que se quiera constituir, lo que además “atenta contra la esencia de la libertad económica”.
Los montos que se deberían pagar tendrían que ser por capital social y no por actividad, y esto constituye sin duda alguna una forma de romper con la actividad económica”
Antes, constituir una compañía era sencillo pues prácticamente lo único que el emprendedor tenía que hacer era aportar un capital social, el cual lo podía hacer a través de un inventario o de unos activos.
“Al final la persona tenía un capital suscrito y un capital pagado. Era obviamente mucho más fácil y había mayor libertad. Ahora quieren recaudar por recaudar, que es absurdo. Entre buscar incentivar y buscar recaudación, aquí se fueron por mayor recaudación”, añadió el abogado.
Según los nuevos montos, una persona que quiera montar un quiosco debe desembolsar 22,8 millones de bolívares, una suma que puede superar con creces el capital dispuesto por un emprendedor para abrir una venta de confites y chucherías.
Para registrar una firma personal se requieren 68,4 millones de bolívares, cuando anteriormente una persona que quería legalizar su nombre solo debía cancelar en promedio 1,5% de su capital, de acuerdo con Vito Vinceslao, coordinador de Fedecámaras Apure y presidente de la Cámara de Comercio, Industrias y Servicios de la entidad.
Además, pese a la crisis del sector educativo y al riesgo de que cierren colegios privados, uno de los montos más altos es el que se necesita para registrar un plantel educativo: 387,6 millones bolívares. Dato curioso es que con solo 62,4 millones de bolívares adicionales se puede constituir una empresa en el arco minero, un negocio seguramente mucho más lucrativo, aunque con un fin considerablemente menos beneficioso para la sociedad.