¿Isaías no va a llamar al cura Palmar?, por Simón Boccanegra
El cura Palmar dijo ante los parlamentarios que si él hablaba se caía el gobierno. Lógicamente, se trata de una exageración pedagógica, pero lo que esta implica es que el susodicho sacerdote sabe de robos y sinvergüenzuras en Pdvsa tan graves y tan impunes que revelarlas podría poner en graves aprietos al gobierno. Dejando de lado la improbidad ética de un cura que sabiendo de pecados y no estando constreñido por el secreto de confesión, los calla, hay alguien que sí debía haber intervenido. Es el Fiscal General de la República. No puede ser que un cura conocido por sus nexos con el oficialismo, que ha hecho denuncias terribles sobre lo que pasa en Pdvsa, no haya sido citado por la Fiscalía para que revele lo que sabe o, en caso contrario, para que quede claro que se trata de un charlatán.
La frase de Palmar constituye una notitia criminis. La Fiscalía tiene que citar a Palmar y esclarecer el sentido de sus palabras. Si son serias, la Fiscalía debe abrir una investigación inmediatamente y tomar las medidas del caso.
Pero, qué va. Isaías no tiene coraje para desafiar a Chávez.
Ya este absolvió a prioria su compinche Rafael Ramírez y lo atornilló en la superchamba. Para el poeta Isaías esa es santa palabra.