José Vicente ayer, por Simón Boccanegra
“Lamentable, pero la única manera de que cese la actuación narcocomplaciente de jueces venezolanos es que EEUU les quite la visa.Van varios y la lista es larga. Juez venezolano que favorezca a lavadores de dinero o narcos no puede pisar EEUU. Es la respuesta a la impunidad y complicidad imperantes en el país” . ¿Qué escuálido, qué conservador pitiyanqui escribió este texto lacayuno? Ningún escuálido ni ningún lacayo del imperialismo. Fue nada menos que José Vicente Rangel, el 18 de mayo de 1997. Ese mismo caballero, cuya inconsistencia consigo mismo es un caso clínico, lanzó hace nada rayos y centellas contra una medida igual, motivada por las mismas razones, tomada por EEUU contra varios generales de la Guardia Nacional, supuestamente narcocomplacientes. Ambiguo frente a la descertificación, decía: “Para adversar con autoridad la descertificación hay que dar muestras concretas de voluntad de actuar, implacablemente, contra el narcotráfico y ofrecer garantías de que la ayuda que se recibe es empleada de manera inobjetable, intachable”.
Entonces como ahora, los gringos veían la viga en el ojo ajeno y no la pajita en el propio. Pero eso no era problema para el Gran Inquisidor de la comarca, quien les concedía el derecho a la unilateralidad en esa materia. En varios textos aseveró que a EEUU no le quedaba más remedio que proceder de ese modo. Hoy, embojotado en la bandera nacional, la descertificación hiere su “anti-imperialismo”. Por la boca muere el pez.
