La Asamblea Nacional quiere proteger a las niñas de Nicaragua

La Asamblea Nacional aprobó el 25 de este mes una ley cuyo título completo es el siguiente: «Ley Aprobatoria del acuerdo de cooperación entre la República Bolivariana de Venezuela y la República de Nicaragua EN MATERIA DE PROTECCIÓN, ASISTENCIA Y RESGUARDO DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES». La ley cuenta nueve artículos, pero tal vez por descuido omitieron el décimo: «Queda encargado de la ejecución de esta ley el Excelentísimo Presidente de la República de Nicaragua, camarada comandante Daniel Ortega. Será asistido en todo cuanto atañe en particular a la protección, asistencia y resguardo de las niñas, por su esposa, la camarada poetisa Rosario Murillo». Pero, me pregunto, ¿no será que la Asamblea, no habiéndose atrevido, sin autorización de Chávez, a criticar al violador Ortega en su momento, encontró la vía de la ironía para dejar sentada su opinión sobre las «hazañas» sexuales del Presidente nica, en particular las atinentes a la violación sostenida de su hijastra Zoilamérica? De pronto. Se recordará que la ministra de la Mujer del gobierno paraguayo impidió, con su protesta enérgica, la presencia de Ortega en la toma de posesión de Fernando Lugo. Pocas semanas después, la ministra de la Mujer del gobierno de Honduras renunció al cargo, también como protesta por la presencia de Ortega en Tegucigalpa. Decenas de organizaciones feministas del continente han dejado conocer su posición de repudio y sanción moral al degenerado que para mala suerte de su pueblo preside hoy a Nicaragua, en inmoral alianza con el somocismo. Da la impresión de que Daniel Ortega ya no va a poder moverse por este continente. Donde quiera que vaya será perseguido por el rechazo público, y ojalá que no solamente de las organizaciones feministas. Por su parte, la Asamblea Nacional venezolana, con el voto mayoritario del PSUV, ha entregado a Nicaragua un instrumento legal para proteger a los niños, niñas y adolescentes de ese país de las malandanzas de su propio Presidente. Enhorabuena.