La boliburguesía al ataque, por Simón Boccanegra
Ya una vez pasamos por eso de que para enfrentar a los amos del valle había que crear una nueva burguesía. Fueron los doce apóstoles de CAP. Ahora Chávez, que parece gemelo de CAP, se plantea el mismo objetivo de «ingeniería social»: crear su propia burguesía, los capitalistas del régimen.
La acumulación originaria, como habría dicho Marx, se produce robando al Estado. Después, como hizo la Mafia, tal vez se hagan negocios lícitos, pero el capital de origen sale del robo. La devaluación y la inflación le abren una ventana de oportunidades a eso que Juan Carlos Zapata llama la boliburguesía, la burguesía bolivariana, los nuevos ricos o los ricos de la revolución. Fogade, pongamos por caso, todavía mantiene una importante cartera de activos provenientes de los bancos quebrados en 1994. Por ejemplo, Astilleros de Oriente, que era de los Di Mase. Su precio, el año del deslave bancario, era de 186 millones de bolívares, que al cambio de entonces era un poco más de un millón de dólares. Hoy son un poco menos de cien mil dólares, al cambio oficial, y al otro unos 60 mil. ¡Qué manguangua! La boliburguesía presiona para que les sea vendido al precio de la deuda, el de 1994.
Pero las presiones no las hacen directamente. Vienen de arriba, de los «socios» en el poder. Muchos de ellos son de los que quedaron vivos el 4F y el 27N. Hoy no sólo estánvivos sino que sonunos vivotes.
