Ley del Embudo, por Simón Boccanegra
Chávez amenaza con cárcel a los ganaderos que proponen defenderse de las invasiones por su propia cuenta. Ciertamente, la «autodefensa» sería ilegal, pero también es ilegal hacer la «reforma agraria» a punta de invasiones. Si el gobierno no puede garantizar soluciones prontas, pacíficas y legales, a los problemas agrarios, ¿cómo carajos puede pedir que se quede quieto a quien se siente amenazado por una «pacífica comunidad», que puede terminar matándolo a batazos y clavándole 27 puñaladas encima de un tiro? El presidente no dijo anoche ni una palabra de rechazo a los procedimientos ilegales de las invasiones (por legítima que pudiera ser, en algunos casos, su motivación social), pero, en cambio, se regodeó, con la prepotencia cuartelaria que muchas veces se le sale, en la amenaza a los ganaderos. «El monopolio de las armas lo tiene el gobierno». Cierto, pero no recuerdo que haya aplicado esta doctrina en el caso de las armas que la Disip trató de recuperar en una casa del MVR en La Pastora. Al contrario, obligó al comandante Pineda Castellanos a interrumpir el procedimiento y dejarle los hierros a sus muchachos. La Ley del Embudo llaman eso.
