Maduro anuncia 10 nuevos casos de covid-19 y amenaza a la empresa privada
Durante su intervención Maduro acusó a un sector de la economía nacional que «no quiere colaborar» con el trabajo para mitigar el impacto de la covid.19 en el país
El mandatario Nicolás Maduro informó este miércoles 22 de abril que, durante las últimas 24 horas, se registraron 10 casos nuevos de covid-19 en territorio nacional, alcanzando la cifra de 298 contagios totales desde el 13 de marzo.
Dos casos fueron detectados en Táchira, corresponden a un joven de 19 años que ingresó al país desde Cúcuta, a través de las trochas y pudo haberse contagiado por contacto con un familiar que ya dio positivo; y a una mujer de 57 años que acudió a un hospital centinela al sentir síntomas.
Los otros ocho forman parte del foco desarrollado en Nueva Esparta, a raíz de una academia de beisbol que se mantuvo operativa durante más de un mes después de que se decretó la cuarentena. Maduro no entró en detalles sobre este grupo de infectados.
Además agregó que de los 298 casos totales de covid-19 en el país, 85 pacientes reciben atención en hospitales, 54 en centros de atención integral (CDI) y 27 en clínicas privadas. La cifra la completan 10 fallecidos y 122 presuntos recuperados, aunque las autoridades sanitarias no cumplen con las recomendaciones dictadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para dar alta médica.
Ataque a empresa privada
Durante su intervención Maduro acusó a un sector de la economía nacional que «no quiere colaborar» con el trabajo para mitigar el impacto del coronavirus en el país.
Denunció que diversos empresarios aprovechan la situación para «especular» y «robar» al pueblo con precios inflados de bienes y servicios.
En este sentido, les instó a colaborar y buscar entendimiento con el gobierno chavista, para luego advertir que está dispuesto a tomar «medidas drásticas» para proteger al pueblo.
«Hay sectores económicos que no quieren colaborar con el país. Tenemos la intención de entendernos o hacernos entender, si tengo que tomar medidas drásticas contra todos estos sectores que pretenden aprovechar la pandemia para robar al pueblo, para especular, las tomaré», aseguró.
De esta forma Maduro empieza a fraguar un discurso que busca justificar la implementación de un nuevo sistema de control de precios, aunque ya la propuesta se gestaba en su gabinete en las últimas semanas. En una reunión entre el ministro de Agricultura y Tierras, Wilmar Castro Soteldo, con otros altos funcionarios y productores privados, se pidió a estos últimos evaluar la posibilidad de instalar mesas de trabajo para evaluar las estructuras de costos y acordar precios.
Sin embargo, los productores alertan que es imposible establecer un sistema de control de precios en el contexto actual, pues el dólar varía su precio día tras día, por lo que los insumos para producir se encarecen cada vez que los adquieren, a lo que se suman problemas estructurales como la escasez de gasolina y las dificultades para transportar mercancías.
La inyección de bolívares al sistema monetario nacional, como parte de los bonos otorgados por el Ejecutivo al pueblo para que «resistan» la cuarentena, sumado a la paralización del comercio y a la escasez de oferta de dólares por este contexto de incertidumbre, han impulsado una subida dramática del valor del dólar, dándole un nuevo impulso a la inflación durante abril.
A pesar de este contexto desfavorable para la producción nacional, Maduro insiste en poner «mano dura» de ser necesario, acusando a los productores y comerciantes de «especuladores» que deberán respetar las disposiciones del gobierno oficialista en caso de imponer un control de precios.
«Pido una postura de entendimiento, pero con el plan de hacer respetar al pueblo, las leyes, el Estado, de hacernos respetar como gobierno. Que protejamos al pueblo rubro por rubro, producto por producto, precio por precio. Sabemos hacerlo, vamos a desplegarnos, para que sepan que el cambur verde mancha, especuladores», advirtió.
Finalmente, aprobó una serie de créditos en petros y pidió al gabinete que se preparasen mecanismos para incrementar el uso de un activo digital presuntamente basado en el precio del petróleo, justamente tras la caída más brutal que ha sufrido el mercado petrolero en décadas.