Mal de muchos, consuelo de Alfredo Ruíz, por Sebastián Boccanegra

El defensor del pueblo de facto, Alfredo Ruíz ha preferido, hasta ahora, no tener mucha presencia en los medios de comunicación. Sus apariciones eran muy pocas antes de que el informe de la alta comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, le señalara como uno de los responsables de las violaciones a esos derechos que ocurren, cotidianamente, en Venezuela.
Desde ese momento ha comparecido en varias oportunidades a entrevistas siempre en medios públicos, donde las preguntas no sean «impertinentes», donde el trato hacia el entrevistado sea con guante blanco.
Las respuestas que ha dado no se apartan del guión oficial. Vuelve a demostrar que es un militante disciplinado del Partido Socialista Unido de Venezuela. Evade responder lo grueso que denuncia el informe Bachelet. Se va por las ramas para tratar de lavarse su cara. El descaro es total, aunque todavía no tiene el desparpajo de su valedor el fiscal de facto, Tarek William Saab.
Según Ruíz el informe está sustentando en opiniones u informaciones que no tienen fuentes. Miente de una manera descarada sobre este punto y sobre todos los demás. Diversas ONG, víctimas y familiares de las víctimas dieron sus testimonios sobre las innumerables violaciones a los Derechos Humanos que ocurren en el país.
Ruíz dice que Bachelet no tomó en cuenta a las víctimas de las guarimbas, olvidando que solo los funcionarios gubernamentales violan los derechos humanos. Eso es algo que él sabe perfectamente, porque durante años ejerció como defensor de los derechos humanos, pero cuando le tocó decidir entre seguir ejerciendo ese rol o pasarse para el lado de los violadores todos somos testigos de cual fue su elección.
Entre otras cosas, Ruíz pretendió justificar las violaciones a los derechos humanos que ocurren en Venezuela, de las cuales es cómplice por omisión, con el argumento de que en todos los países se producen. Definitivamente, mal de muchos consuelo de Ruíz, quien está demostrando que es partidario de otro refrán que dice que el fin justifica los medios. Lamentable papelote.