Bill Richardson: «Creo que lo agarré a Maduro en un mal día»
La intención del gobierno de Estados Unidos con estas negociaciones es conseguir la liberación de seis ejecutivos de Citgo, así como de los exmilitares estadounidenses Luke Denman y Airan Berry, quienes participaron en la denominada Operación Gedeón
El exgobernador de Nuevo México en Estados Unidos, Bill Richardson, sostuvo una conversación con Nicolás Maduro como parte de una misión especial de acercamiento con las autoridades venezolanas que duró cuatro días, con el objetivo de abogar por la liberación de ocho presos políticos en suelo venezolano, entre ellos, siete ciudadanos estadounidenses.
Las negociaciones incluyeron tres conversaciones con el vicepresidente de Información del chavismo, Jorge Rodríguez, un contacto telefónico y luego una reunión presencial con Nicolás Maduro. Sin embargo, el esfuerzo quedó en nada ya que no pudo llegar a un acuerdo para liberar a ninguno de los detenidos.
De acuerdo con declaraciones de Richardson a The Washington Post, le dio la impresión de que la misión falló porque encontró a Maduro en un «mal día», en el que atendía diversos asuntos, por lo que la conversación de hora y media, pese a ser cordial y transcurrir sin inconveniente alguno, no llegó al término esperado por el exgobernador.
«Creo que lo agarré (a Maduro) en un mal día, cuando estaba atendiendo un montón de problemas. Era optimista al inicio, hablamos durante una hora y media, fue muy cordial, muy amistoso, pero no dejó claro que no cedería», explicó.
El exgobernador viajó a Venezuela con el equipo del Centro Richardson, una organización especializada en negociaciones para la liberación de personas presas o secuestradas por regímenes o grupos criminales.
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Pese a que no poseía instrucciones concretas por parte del gobierno de Estados Unidos, sino que encabezaría directamente el curso de la negociación, la misión fue coordinada con el representante especial estadounidense para Venezuela, Elliot Abrams y con el enviado presidencial especial para Asuntos de Rehenes, Roger Carstenes.
Desde Estados Unidos, recibió el beneplácito para ofrecerle al régimen de Maduro ayudar a hacer llegar al país ayuda humanitaria para lidiar con la crisis que sufre el país, especialmente en el contexto actual de pandemia.
«Creo que perdieron una oportunidad de hacer las cosas mejor en materia humanitaria. Podría ser una puerta abierta con un resultado decepcionante que creí, era conseguible. Persistiremos, pero dejaremos que pase un tiempo primero», acotó Richardson.
La intención del gobierno de Estados Unidos es conseguir la liberación de seis ejecutivos de la filial de Pdvsa en Estados Unidos, Citgo, detenidos en 2017 por presuntos cargos de corrupción, así como de los exmilitares estadounidenses Luke Denman y Airan Berry, quienes participaron en la denominada Operación Gedeón a inicios de mayo.