Nico Manzano: «En épocas de conflictos y guerras también hay gente creando»
«Yo y las bestias», ópera prima de Nico Manzano, se alzó con el premio a la Mejor Película del Festival de Cine Venezolano, previo a esto fue galardonada como Mejor película y Mejor música original en el «Soundscreen Music Festival de Ravenna», Italia. TalCual conversó el director sobre este largometraje, su producción, recorrido por festivales y próximos pasos
El que Yo y las bestias no fuera seleccionada para unos talleres de guion no impidió que Nico Manzano (Caracas, 1986) insistiera en ella. Tampoco la crisis venezolana de 2016 ni las protestas y oleada de represión que vivió el país en 2017. Tras algunos tropiezos, y bastantes aciertos, finalmente la película se estrenó el año pasado en dos festivales de cine clase A, en simultaneo: Tallin Black Nights, en Estonia y Mar del Plata, Argentina; y recientemente se alzó con cinco premios en el 18 Festival de Cine Venezolano, entre ellos mejor película de ficción.
El largometraje, ópera prima del realizador caraqueño actualmente residenciado en Ciudad de México, cuenta la historia de Andrés Bravo, quién, después de dejar su banda de rock alternativo, comienza un proyecto en solitario desde cero. Sintiéndose separado de un entorno que refleja los primeros síntomas de la crisis venezolana y aislado, porque la mayoría de sus amigos se han ido del país, el joven músico conoce a dos entidades enmascaradas (las bestias), que le hacen sentir como si no estuviera solo.
«Se premia una historia que recorre lugares informales y auténticos de la creatividad (…) Un conmovedor y frágil universo que es mar, color, música y búsqueda», reza el veredicto del jurado venezolano.
Aquí el momento. El jurado anuncia que ganamos Mejor Película de Ficción en el 18 @Fest_CineVzlano
🙌✨🌕🌕 pic.twitter.com/ZdwlzN28cL— Yo y Las Bestias (Me and The Beasts) (@yoylasbestias) July 22, 2022
Mejor dirección, mejor sonido, mejor música y mejor ópera prima son los otros galardones que recibió en la cita de Mérida. También una mención especial para Jesús Nunes, actor principal del filme.
El filme es una tragicomedia fantástica, filmada entre Caracas, La Guaira y Falcón; que reúne muchas vivencias de su autor, quien también es músico –fue miembro de las bandas Boom Boom Clan y Sexy Bicycle –, de sus colegas del medio; una película «muy personal, que nació orgánicamente», indie, con una estética encantadora, que habla caraqueño y rinde homenaje a los maestros Carlos Cruz-Diez, Jesús Soto y Ramón Vásquez Brito, y por supuesto, a la música.
TalCual conversó con Manzano, director, guionista, músico y director de fotografía de Yo y las bestias; sobre la película, su producción, recorrido por festivales y próximos pasos.
—¿Cómo surge esta historia?, ¿cuánto tiempo estuvo trabajando en ella?
—En 2016 me puse como meta escribir, en mis vacaciones, una película. En ese momento yo daba clases en la Escuela Nacional de Cine y las vacaciones de la escuela eran entre diciembre y enero. El 2016 fue un año de escasez y de resolver la vida, esto quizás disparó en mí ciertas reacciones creativas ante lo que estaba sucediendo; creo que también el hecho de que esta película no entró a unos talleres de guion.
«Para ese momento me encontré con un amigo, Rafael Giner, que tenía siete años produciendo un disco doble. Me quedé pensado en eso, comencé a imaginar cómo sería hacer ese disco doble en la Venezuela actual. A partir de ahí comenzó la historia, aunque la música y las bestias surgieron hace diez años, cuando grababa con Nika Elía».
«La película nació orgánicamente, la escribí muy rápido, porque yo tengo un bagaje de vivencias, propias y de amigos, muy amplio. Desde los 15 años estoy metido en una banda. Es una película muy personal, aunque siento que yo no soy el protagonista, a él (Andrés Bravo) le falta una encima social que yo sí tengo».
«Luego en 2017 ubicamos una oficina para comenzar a preproducir y enseguida arrancaron las protestas. Hubo gente que se salió del proyecto, porque decía no podía concebir salir de su casa en un momento así. Los que quedamos teníamos reuniones de estatus en la mañana, luego los que querían manifestar se iban y lo hacían. En épocas de conflictos y guerras hay gente también haciendo cosas, creando; y eso un poco lo que vive el protagonista, que está pasando un momento difícil, pero para él la creación era lo primero».
«Las protestas retrasaron un poco las cosas, pero justo cuando decidimos que teníamos que comenzar a grabar, así tuviéramos que saltar barricadas, se apagó todo: el primer día de rodaje fue el último de protestas. Rodamos en dos meses».
—La película tiene muchas escenas que parecen cuadros de Edward Hopper. ¿Hay un guiño a la obra del «pintor de la soledad» en el filme?
—El cine es un conglomerado de todas las artes. Yo y las… comienza con una cámara de cromosaturación amarilla, que hace referencia a Carlos Cruz-Diez. Luego pasa a un paisaje salino (Las Cumaraguas, Falcón) que recuerda a las pinturas de Ramón Vásquez Brito. También están los penetrables de (Jesús) Soto. Las referencias visuales que están dentro de la película muchas de ellas tienen que ver con homenajes que yo rindo a otras disciplinas del arte venezolano.
Yo y las bestias tiene un diálogo de colores que hablan de estados de ánimo, de presencias; y también hay elementos que hablan de una clase media desvencijada.
—El largometraje ha tenido un buen recorrido por festivales. ¿Qué tal ha sido la experiencia?, ¿esperaba esta respuesta del Festival de Cine Venezolano?
—Uno nunca imagina hasta dónde puede llegar. Cuando estás haciendo la película te puedes proyectar o pensar en ciertos festivales, pero al final no sabes para dónde va. Nunca pensé que llegaría a Estonia. Íbamos a estrenar en el Festival de Rotterdam, pero la pandemia nos sacó de la exhibición. Luego llegó Bendita Films, que es quien se han encargado de postular la película a festivales.
«Hace un mes estuve en el Festival de Kimolos y vi cómo una pareja de irlandeses se reía a carcajadas con los chistes de la película. Me llamó la atención que una película tan local pueda llegar a otros públicos, aquí se cumple eso de Describe tu aldea y serás universal. También lo que vi en Grecia es una demostración de que uno no se tiene que poner ningún traje para intentar ser entendido, creo que cuando uno es veraz con lo que quiere decir no hay que tener miedo, ni siquiera en la forma de hablar».
«En cuanto al Festival de Cine Venezolano, fue muy emocionante. Pensamos que podíamos ganar ópera prima, pero no mejor largometraje. Tener reconocimiento internacional para mí es importante, sobre todo porque nos indica que nuestra narrativa puede ser universal, pero ser reconocido en casa es reconfortante… Hay personas que tienen un estigma con el cine venezolano, no se ven representados en la narrativa del cine venezolano y muchos se han acercado a agradecerme y decirme que se vieron reflejadas en la película, en la historia».
—¿Yo y las bestias contó con apoyo del Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC) o de alguna otra institución del Estado para su realización?
—No, la película no contó con financiamiento del CNAC ni de otra institución venezolana. En ese momento los proyectos no estaban teniendo suficiente apoyo económico. Por eso no transitamos ese camino, pero no considero que sea algo que no se deba tocar.
«La película pareciera que tuviera más presupuesto que el que realmente tuvo, pero no. Primero solo tenía dinero para rodar la película y dije: la rodamos y después vemos, sin saber todo lo que venía. Luego me mudé a México y estuve dos años invirtiéndole la mitad de mi sueldo a la película. Afortunadamente, se consiguió el premio Ventana Sur, que es para el financiamiento de postproducción de películas, esto le dio un impulso enorme, y más tarde se unió Tres cinematografías, que también nos apoyó en la postproducción».
—¿Cuáles son sus proyectos futuros?, ¿está trabajando en un segundo largometraje?
—Sí, tengo tres proyectos en mente. Suelo tener siempre varios proyectos en simultáneo. Estoy trabajando en una película que escribo junto a Claudia Lizardo, cantante de La Pequeña Revancha: es un largometraje más o menos en el mismo tono de Yo y las bestias, pero aquí el protagonista es un actor de doblaje.
«El segundo es un documental animado. El tercero es un aún no sé qué será, pero tiene que ver con un libro de poemas de mi abuela, se llama Ilusión y contacto. Lo descubrí hace poco, la última vez que estuve en Caracas. Leí los poemas y quedé helado. Siento una responsabilidad tremenda de hacer algo con eso».
Se estima que Yo y las bestias llegué a la cartelera venezolana a finales de septiembre de 2022. Los actores Jesús Nunes, Eduardo Bol, Gael Gaviota, Gabriel Agüero, Jorge González, Carolina Leandro y Estefanía Quijada conforman el elenco de esta pieza de 77 minutos de duración.