OCHA ha identificado más de 8 mil niños con desnutrición aguda entre enero y agosto
Durante los primeros cuatro meses del año, OCHA contabilizó al menos 3.200 niños y niñas menores de cinco años atendidos por desnutrición aguda, lo que muestra un crecimiento del poco más del doble de esta condición. Destaca además que durante los meses de julio y agosto, se produjo una subida en el precio de la canasta básica de alimentos acompañada por una devaluación del bolívar. “Como resultado, el poder adquisitivo de las familias en situación de vulnerabilidad quedó afectado”
La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) publicó este jueves 14 su último informe sobre la situación en el país, donde destacan la identificación y atención de 8.199 niños y niñas menores de cinco años con desnutrición aguda entre enero y agosto de 2022.
El informe no explica el número de niños evaluados, pero sí refiere la atención de 344.300 personas en asuntos relacionados con nutrición. Además, casi 4.600 mujeres embarazadas y en periodo de lactancia fueron identificadas con bajo peso “y recibieron suplementación nutricional para mejorar su estado”.
“La interrupción de la cadena de suministros global y las congestiones del mercado logístico internacional han ocasionado retrasos en la llegada de los insumos para suministrar el tratamiento a los niños y niñas con desnutrición aguda en los centros apoyados por Unicef y los socios”, aclara la organización.
Mientras que en Venezuela, señala OCHA, persiste una alta rotación del personal de salud en los centros de salud públicos a nivel comunitario y hospitalario. Esta situación también “genera retrasos y brechas en la disponibilidad de los servicios de nutrición enfocados en la prevención y el tratamiento de la desnutrición aguda en los territorios”.
Durante los primeros cuatro meses del año, OCHA contabilizó al menos 3.200 niños y niñas menores de cinco años atendidos por desnutrición aguda, lo que muestra un crecimiento del poco más del doble de esta condición.
La Oficina destaca además que durante los meses de julio y agosto, se produjo una subida en el precio de la canasta básica de alimentos acompañada por una devaluación del bolívar. “Como resultado, el poder adquisitivo de las familias en situación de vulnerabilidad quedó afectado”.
Según el informe, al menos 1.8 millones de personas fueron beneficiadas con algún tipo ayuda entre enero y agosto por Naciones Unidas y por decenas de organizaciones humanitarias que brindan respuesta en Venezuela, enmarcadas en un plan que espera apoyar este año a 5.2 millones de venezolanos con necesidades urgentes en el país.