Periodismo y dignidad, por Simón Boccanegra
Yo El Supremo está nervioso e irritable. ¿Qué tendrá Yo El Supremo? Con la pregunta del periodista de O Globoperdió los papeles y se salió de sus casillas, insultando brutal y desconsideradamente al chamo brasileño. Pero este no es mi tema. Lo que este minicronista no entiende es cómo, primero que nada, el propio periodista no le reclamó al Presidente su falta de respeto y no se retiró del acto, en señal de protesta. Incluso si, como dicen, es medio simpatizante del Presidente, no tenía por qué calarse ese abuso. Es más, han debido retirarse todos. El Presidente tiene que saber que no puede insultar impunemente. Es mera cuestión de dignidad.Y lo otro que no entiende este minicronista es cómo la Asociación de Prensa Extranjera (APEX) no ha emitido una declaración de repudio a la grosería del Presidente. Digo que es su obligación hacerlo pues no veo por qué unos periodistas tienen que dejarse agraviar por Chávez, por muy presidente que este sea.
De este tipo de “aquiescencias” es que se compone el poder de los autócratas. Consientes aquí, consientes allá y cuando vienes a ver tienes el chuzo clavado hasta la empuñadura.