Plan 30-60-90 para «aclimatar» a los nuevos empleados, por David Somoza Mosquera
Twitter: @DavidSomozaM
El plan-30-60-90 no tiene nada que ver con medidas corporales. Describe los primeros 90 días de empleo de un nuevo miembro de una empresa, los cuales, en ocasiones, pueden resultar intimidantes sobre todo porque se trata de un período de adaptación y aprendizaje.
En ese tiempo los nuevos empleados tienen mucho que aprender no solo sobre la compañía a la que están ingresando, su cultura y sus normas; sino también acerca del papel que les toca desempeñar dentro de la estructura empresarial.
Así que son varias las empresas que han decidido adoptar el plan de 30-60-90 días para hacer el proceso de aclimatación de los nuevos empleados lo más efectivo y expedito posible.
El plan está concebido como una guía de capacitación para empleados nuevos durante el proceso de incorporación. La idea es que se familiaricen, a medida que se adaptan al nuevo entorno laboral, con las políticas corporativas, el trabajo en equipo y los objetivos a cumplir.
Se trata de una herramienta útil para establecer metas claras y medibles para los primeros tres meses en un nuevo trabajo. De allí que el plan se divida en tres fases, cada una de las cuales se enfoca en diferentes áreas y objetivos específicos.
Durante los primeros 30 días, que representa la primera fase, se imparte capacitación intensiva al nuevo empleado con relación a su puesto de trabajo. El propósito es que aprenda lo más posible sobre la empresa; así como la estructura del equipo y las responsabilidades asociadas a su cargo.
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En este período también es importante que establezca conexiones profesionales con los demás compañeros y superiores, comprenda las expectativas de la compañía y trabaje en función de crear una base sólida para cumplir las metas que le han sido asignadas.
En la siguiente fase –que abarca desde el día 31 hasta el 60– el empleado debería poner en práctica lo que aprendió al asumir nuevas tareas y enfocarse en la implementación y ejecución de los objetivos establecidos en la fase anterior.
En este período es fundamental que el trabajador establezca una comprensión más profunda de los procesos y procedimientos de la empresa, de las metas y objetivos a corto y mediano plazo, y comience a trabajar en proyectos y responsabilidades específicas.
Y la tercera y última etapa comprende desde el día 61 hasta el 90. Para este mes se espera que el empleado comience a dominar las habilidades de su puesto, lo que significa que puede empezar a lograr los objetivos establecidos para él.
Al final, la implementación del plan 30-60-90 trae una serie de beneficios. Al nuevo empleado le proporciona una mejor comprensión de su puesto de trabajo y de la empresa donde ahora labora. Al jefe lo ayuda a identificar las capacidades de los trabajadores y a la compañía a alcanzar el éxito, pues una buena contratación juega un papel clave en su crecimiento.
En conclusión, aclimatar al empleado a su nuevo puesto de trabajo permite que la dinámica fluya mejor y es un ganar-ganar para todos en cuanto a tiempo, esfuerzo y productividad.
David Somoza Mosquera es especialista en temas de negocios y manejo de capital humano.
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