Facultad de Medicina: Prohibir a MIC optar a postgrados en la UCV es discriminatorio
Esta será la primera vez en la que los médicos integrales comunitarios (MIC) podrán participar para ingresar a uno de los 132 postgrados que ofrece la Universidad Central de Venezuela. Las demás universidades que ofrecen la carrera de Medicina en el país llevan seis años aceptando a los egresados de la Universidad Bolivariana para que concursen por estos estudios especializados
La Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela (UCV) aclaró que el acuerdo de otorgar a los médicos integrales comunitarios (MIC) la opción de participar en el proceso de ingreso a los estudios de postgrados clínicos se hace en cumplimiento del artículo 4 de la Ley del Ejercicio de Medicina y para alinear a esta universidad con las demás universidades públicas y autónomas que incluyeron a estos médicos en las convocatorias a sus procesos de estudio para especializaciones desde hace seis años.
El decano de la Facultad de Medicina de la UCV, Mario Patiño, detalla a TalCual que esta era una deuda de esta casa de estudios con la educación en medicina, pues las demás universidades que ofrecen esta carrera: Universidad del Zulia (LUZ), Universidad de Los Andes (ULA), Universidad de Carabobo (UC), Universidad Nacional Experimental «Francisco de Miranda» (Unefm) y Universidad Rómulo Gallegos (Unerg) «tienen años aceptando a los médicos integrales comunitarios en sus aulas».
El vicepresidente de la Academia Nacional de la Medicina, Huniades Urbina, explica que con otorgar la opción a los médicos comunitarios de concursar en el ingreso para los estudios de postgrados clínicos «no se le está dando cargo a nadie»; solo se les permite que «participen y presenten un examen de admisión», pues añade que de quitarles esta posibilidad se les estaría discriminando.
Tanto Urbina como Patiño precisan que la función de la UCV es asegurar la formación de médicos con competencia profesional y corregir las deficiencias para que la población tenga una atención sanitaria digna, de calidad, y con equidad con especialistas bien formados.
«Vamos a permitirles que concursen, que presenten un examen de admisión y, si pasan, bien, y si no pasan, se retiran porque esa prueba es eliminatoria», dice Huníades Urbina. Recuerda que luego viene otra fase, que es la de la prueba psicotécnica, que si no es aprobada por los estudiantes, también quedan fuera del postgrado.
Por su parte, el decano Patiño sostiene que la UCV lo que hace es abrir la posibilidad de presentar la prueba de ingreso a los estudios de postgrados, igual que se hace en cualquier Facultad de Medicina y enfatiza que «si alguien se excluye sería el estudiante por no tener las competencias; pero no la institución, que es lo que estaba pasando y que podría generar un procedimiento de orden judicial por discriminación».
Esta aclaratoria surge luego de que la Federación Médica Venezolana (FMV) emitiera un comunicado el pasado 7 de noviembre rechazando categóricamente «la decisión del Consejo de Facultad de la Escuela de Medicina de la Universidad Central de Venezuela de aceptar a los Médicos Integrales Comunitarios para concursar en los postgrados universitarios».
La FMV argumenta que su opinión se basa en «la escasa preparación académica de este grupo de profesionales que fueron formados, según su baremo, para realizar prevención en salud».
Añaden que para ingresar a los postgrados de la UCV se necesita una formación académica sólida y haber realizado internados y residencias hospitalarias.
El profesor Mario Patiño responde e insiste en señalar que ellos no son quienes para afirmar si hay deficiencias o no en la formación de los médicos comunitarios, y que la Facultad de Medicina de la UCV —pionera en educación en Medicina tanto en pregrado como en postgrado— está para contribuir en la formación de un profesional sanitario competente, para corregir las deficiencias y minimizar toda consecuencia indeseable sobre la salud de los ciudadanos.
La primera prueba en la que podrán participar los médicos integrales comunitarios para ingresar a uno de los 132 postgrados que ofrece la Universidad Central de Venezuela será el próximo 15 de diciembre.
«Todos los médicos formados en el país tendrán la posibilidad de participar en el proceso de selección, en igualdad de condiciones, no hay ninguna prerrogativa para nadie», asevera el decano Patiño.
Por su parte, el médico Huníades Urbina asegura que los exámenes son los mismos para todos los estudiantes, tanto para los médicos egresados de las universidades tradicionales como para los que cursaron estudios en la Bolivariana. «Pueden tener la certeza que los exámenes no van a ser viciados. El que no estudia no pasa», sostiene.
Ambos médicos también indican que el comunicado de la Federación Médica Venezolana cae en contradicciones. Urbina indica que el texto está en contra de la Ley de Ejercicio de la Medicina, que en su artículo 4 señala que «para ejercer la profesión médica se requiere poseer un título de Doctor o Doctora en Ciencias Médica, Médico Cirujano, Médica Cirujana, Médico Integral Comunitario o Médica Integral, expedido por una universidad venezolana de acuerdo con la leyes que rigen la materia».
Urbina se interroga: «¿Cuál es la novedad en el comunicado de la FMV?». El decano Patiño añade que en el comunicado «hay falta de información con un manejo sesgado, con otros fines que no son académicos».
Suma que este texto de la Federación Médica Venezolana deja ver «que la obsolescencia de las instituciones los lleva a caer en contradicciones o en impresiones que, lamentablemente, tienen eco en sectores de la población».
Mario Patiño recuerda que este acuerdo estaba planteado hace algún tiempo, «pero estaba paralizado por razones políticas».
TalCual intentó comunicarse con Douglas León Natera, presidente de la Federación Médica Venezolana, pero no hubo respuesta. Se pudo conocer que está de reposo médico tras una intervención quirúrgica.
Por otra parte, el decano Patiño dice que conversó con un expresidente de la FMV, quien le indicó estar en desconocimiento de ese pronunciamiento.
¿Formación a medias?
Sobre la formación de los Médicos Integrales Comunitarios no hay mayor información. Mario Patiño afirma que se forman en seis años y no en tres como se dice comúnmente. Huniades Urbina afirma que «ellos tienen 5.000 horas académicas de formación y nosotros (las universidades tradicionales) tenemos 8.000; ya por ahí vamos viendo que algo no va bien y eso es un problema de la Universidad Bolivariana o de las otras que los forman».
De la misma manera, Urbina expone que el pensum de estudio de la Medicina Integral Comunitaria «es un secreto bien guardado porque no se conoce a ciencia cierta y, aparentemente, no cumplen con lo que hacemos en las universidades tradicionales».
También se desconoce si los Médicos Integrales Comunitarios hacen internados y residencias hospitalarias. El vicepresidente de la Academia Nacional de la Medicina cree que no cumplen con este requisito y apoya su observación por consultas que les han realizado desde la Academia de Medicina de Colombia y la de Perú sobre personas que han llegado a estos países con la intención de ejercer la carrera: «A través de ellos fue que pudimos conocer más o menos el pensum de estudio», afirma.
Para el decano Mario Patiño el propósito de crear esta carrera que se inició en el año 2005 «era loable», pero considera que «vale la pena que el país conozca el plan de formación» de los Médicos Integrales Comunitarios. Recuerda que en ese entonces la idea era formar «un recurso humano para la atención del primer nivel de salud»; es decir, ambulatorios en las comunidades y enfatiza que «esto es una deuda que tiene el país desde hace muchísimos años».
En las páginas web de la Universidad Bolivariana de Venezuela y la Universidad de Ciencias de la Salud «Hugo Chávez» se describe que los egresados de la carrera de Medicina Comunitaria Integral están capacitados para trabajar en consultorios de Barrio Adentro, Centros Médicos de Diagnóstico Integral (CDI), Centros Médicos de Alta Tecnología, Servicios de Rehabilitación Integral, ambulatorios, hospitales y otras instituciones de la salud, «tanto en Venezuela como en otro país que lo solicite».
Sin embargo, en ninguno de los portales está disponible el pensum de esta carrera para conocer cuáles son todas las materias obligatorias y opcionales de este programa universitario.
Migración de médicos
El decano de la Facultad de Medicina de la UCV recuerda que en el país ha habido un éxodo gigantesco de profesionales de la salud. Expone que en los últimos 20 años han migrado entre 30.000 y 40.000 médicos formados en las universidades tradicionales, autónomas y experimentales.
Dice que es difícil estimar cuántos de estos médicos quedan en el país, pero calcula que pueden ser alrededor de 20.000.
Esta deserción ha sido denunciada por la Federación Médica Venezolana desde hace varios años y asegura que esto se debe a la crisis humanitaria compleja que atraviesa el país, sumada a la crisis económica y política. El pasado 10 de marzo, Día del Médico, informaron que 42.000 trabajadores sanitarios se han ido, pero no se especificó el período de tiempo en el que se han producido las salidas del país.
En Venezuela existen unos 50.000 o más médicos integrales comunitarios, indica Patiño, quien reconoce que este «es un recurso humano que está ahí, que hay que evitar que hagan daño a la población, y si hay una limitación, se debe corregir para que la población tenga atención sanitaria con médicos bien formados».