Provea asegura que Maduro terminó de consumar un golpe de Estado iniciado en 2019

La organización alerta que estas acciones constituyen un «acto de provocación» que puede alentar «acciones no previstas por la Carta Magna»
El Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos (Provea) señaló que Nicolás Maduro terminó de consumar un golpe de Estado que inició en enero de 2019, con la reciente imposición de una junta directiva para la Asamblea Nacional violando todos los protocolos y normativas establecidas, por lo cual asegura que no reconocerá a estos diputados como autoridades del parlamento.
«Provea no reconoce la supuesta directiva de la Asamblea Nacional impuesta por la dictadura, este 5 de enero de 2020, de manera inconstitucional», resaltan en un comunicado.
La organización destaca que durante la ilegal juramentación se violó la Constitución y la normativa del Reglamento de Interior y Debate, por la cual se rige el parlamento.
También recuerdan que hubo presencia de funcionarios de la Guardia Nacional (GN) ocupando las instalaciones del hemiciclo y sus adyacencias, los cuales impidieron el ingreso del presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, así como de otros diputados al Palacio Legislativo.
De esta forma, en un acto «tutelado por la fuerza militar» y sin quórum necesario para sesionar, se autojuramentaron los diputados Franklin Luis Parra como presidente, Franklin Duarte como primer vicepresidente y José Gregorio Noriega como segundo vicepresidente, además de Negal Morales como secretario de Cámara.
«Esta acción arbitraria es la continuidad de la política de atentar contra el único Poder Público legítimo existente en Venezuela desconociendo la voluntad popular», argumenta Provea.
En este sentido, acotan que la política de persecución y hostigamiento contra los diputados electos por el pueblo de forma democrática ha sido una constante por parte del gobierno de Nicolás Maduro desde el 2015.
«Desde que la oposición política asumió la mayoría del parlamento la dictadura se dedicó a obstaculizar la labor parlamentaria acompañada de una política represiva encarcelando diputados y obligando a más de 20 a un exilio forzado», insisten.
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Provea argumenta que los hechos acontecidos en la Asamblea Nacional este domingo 5 de enero violan el artículo 5 de la Constitución, que establece que «todo acto dictado en ejercicio del Poder Público que viole o menoscabe los derechos garantizados por la Constitución y ley, es nulo».
Además, alerta que estas acciones constituyen un «acto de provocación» que puede alentar «acciones no previstas por la Carta Magna», además de obstaculizar el trabajo de organismos internacionales, como es el caso del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Por lo tanto, insisten en que las condiciones para una salida pacífica, constitucional y democrática a la crisis del país, cada vez se reducen más. «Responsabilizamos a Maduro y la cúpula con la que viene gobernando de facto por la generación de condiciones para el aumento de la violencia y la confrontación en el país», extienden.
Además, solicitan a la comunidad internacional y a las instituciones democráticas del mundo, condenar este nuevo «atentado contra la institucionalidad» en Venezuela.