Reos del retén de Cabimas detonan granadas en protesta para pedir atención médica
Según el Observatorio Venezolano de Prisiones el conflicto comenzó porque los pranes estaban exigiendo atención para los enfermos de tuberculosis que están dentro del retén de Cabimas
El Observatorio Venezolano de Prisiones reportó la tarde de este sábado 27 de junio que se escucharon seis detonaciones de granadas dentro del Retén de Cabimas, ubicado en el estado Zulia.
Las imágenes presentadas en las redes sociales muestran un incendio dentro de la prisión.
Según el OVP, el conflicto comenzó porque los pranes estaban exigiendo atención médica para los enfermos de tuberculosis que están dentro del precinto.
El 5 marzo se reportó el fallecimiento del cuarto recluso por tuberculosis en lo que va de 2020, fue identificado como José Luis Montilla, de 47 años. Estaba privado por el delito de robo tráfico de drogas.
#EnEsteMomento se vive una situación de tensión dentro del Retén de Cabimas, estado #Zulia. Al parecer, los pranes exigen atención médica para los enfermos de tuberculosis y han detonado al menos 6 granadas dentro del recinto #27Junio 📸 cortesía pic.twitter.com/tweDCBodRb
— Obs. V. de Prisiones (@oveprisiones) June 27, 2020
La población que vive alrededor del recinto penitenciario también afirma, vía redes sociales, que se escuchan disparos. Hasta el momento, ningún organismo oficial ha dado declaración sobre lo que ocurre.
Versiones no oficiales señalan que se estarían enfrentando reclusos de los pabellones B y C.
Las avenidas Intercomunal, Andrés Bello y Pedro Lucas Urribarrí se mantienen con presencia policial de funcionarios de la Guardia Nacional, Policía Nacional Bolivariana, Policía del Zulia, Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas), Mancomunidad Policial COL y Policabimas, reportó El Pitazo.
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El riesgo de las cárceles
La situación de los centros penitenciarios es una preocupación constante para los organismos que defienden los derechos humanos en el país, debido a que se presentan casos de hacinamiento y violencia extrema, aunando ahora la covid-19 que podría incrementar los riesgos de estar en una cárcel bajo esas condiciones.
Este problema es conocido en el retén de Cabimas, e incluso se anunció un cierre del retén en febrero, cuando el gobernador del estado Zulia, Omar Prieto, confirmó, durante una reunión de seguridad en febrero, que su clausura iniciaría en fases con la revisión de expedientes y traslado de 400 penados a otras cárceles del país.
Por eso la fundación Insight Crime advirtió sobre la extrema vulnerabilidad que padecen los privados de libertad en Venezuela, con un ambiente que sirve de caldo de cultivo para la propagación de cualquier enfermedad.
«Uno de los principales problemas en estos espacios, además de la insalubridad y del hacinamiento, es que no se separa a los internos que tienen alguna enfermedad de los sanos. La falta de ventilación, acceso a luz del sol, agua potable ni servicios de recolección de basura, los hace de las poblaciones más vulnerables del país ante el coronavirus», indicaba un informe de Insight Crime publicado a inicios de abril.
En Zulia concretamente actualmente se registra el foco de covid-19 más importante del país, con más de 700 pacientes positivos confirmados y al menos una docena de muertes, pese a la poca claridad de los datos ofrecidos por los voceros del oficialismo.
Además, no es la primera ocasión en la que ocurre un motín en una cárcel venezolana desde que iniciaron las medidas de confinamiento a mediados de marzo, pues a inicios de mayo ocurrió un enfrentamiento entre reos y oficiales policiales en el Centro Penitenciario de Los Llanos, que concluyó con casi 50 muertes y decenas de heridos.
