Sic transit gloria mundi, por Simón Boccanegra
¿Por qué Hugo tiene que hacerle swing a todo? Bola alta, bola baja, afuera o adentro, recta o slider y hasta wild pitches: a todo le pasa el bate. Ayer, atragantado de ají, salió a responder los resultados de la encuesta que supuestamente registró un descenso en su popularidad. Y, de paso, de nuevo arremetió contra los medios. Siempre la monomanía de la «conspiración». Juan Barreto debería, como en los tiempos en que lo obligó a prescindir del liqui-liqui, explicarle cuál es la dinámica de los medios. Todo aquello del hombre que muerde al perro y demás obviedades del primer semestre de comunicación social. No hay signo más elocuente de la pérdida de popularidad que cuando un político se pone a discutir los números de las encuestas. Si lo favorecen, las publica en remitidos a toda página. Si es lo contrario, entonces la encuesta es chimba. No hay nada más esquivo y fugaz que la popularidad ni nada más voluble que la opinión pública. Obras son amores, Hugo. Si no hay obras, tampoco hay amores. Te lo dice el latinazo: sic transit gloria mundi, así pasa la gloria del mundo. Que, al decir de Martí, toda ella cabe en un grano de maíz.