Sir Francis Drake explica Economía Política
El Presidente preguntó al minpopopa’todo Cabello cuánto costaba un bloque de construcción para viviendas. El ministro se quedó alelado y sólo atinó a gaguear que no tenía el dato exacto. La pregunta formaba parte de la clase magistral que el Rey de los Piratas nos dictaba el domingo pasado sobre el funcionamiento de la economía. Interlocutoras: dos señoras que dirigen una pequeña fábrica comunal de bloques. No es que el Pirata Mayor tratara de ser sencillo en su explicación, sino que no tenía ni puta idea de lo que hablaba. Inquirió a una de las señoras sobre qué harían con la producción. Esta, muy de sentido común, respondió que la venderían a una empresa que adquiere bloques para, con el producto de la venta pagar a la arenera que les suministra la arena y a una empresa que les vende el cemento, pagarles a los trabajadores y que «quede alguito pa’ la casa». Aquí estalló Sir Francis Drake. «¡Cómo que compran arena! A ver, Isea, ¿cómo es eso?» El famoso especialista en compra-venta transparente de notas estructuradas saltó sobre sus pies. «El lunes intervenimos esas areneras y pedreras, comandante». Prosiguió el audaz bucanero advirtiendo que tuvieran «mucho cuidado» con eso de comprar cemento a una «empresa» ¡Válgame Dios, una «em-pre-sa»! ¡Puro capitalismo! No dijo dónde deberían adquirirlo. Después se enzarzó en una galletosa cuenta sobre costos de producción de un bloque, proponiendo la entrega de la mitad de la producción a la comunidad y la otra mitad, «Diosdado, tú la compras». «La arena y la piedra les salen gratis porque se las da el gobierno, la máquina para la producción les salió gratis porque se la dio el gobierno y el gobierno les compra los bloques». Puro socialismo, pues. Uno veía la cara de Diosdado y casi podía leerle los pensamientos: «Este hombre sí que habla pendejadas». En fin de cuentas, el minpopopa’todo es un hombre negocios. Pero, ¿contradecirlo? Ni de broma.