Stalin González: Decir si vamos o no a parlamentarias en este momento sería apresurarnos
El parlamentario aseveró que la crisis venezolana «no es un problema que se resuelve con cualquier elección» como las parlamentarias
El diputado a la Asamblea Nacional Stalin González (Un Nuevo Tiempo – Distrito Capital) aseveró que la discusión sobre si asistir o no a las elecciones parlamentarias es apresurada, pues primero se deben conseguir las condiciones y garantías para concurrir a futuros comicios.
Durante el foro «Escenario electoral 2020», en el marco de la presentación de la coalición anticorrupción hecha por Transparencia Venezuela, el parlamentario señaló que los esfuerzos actuales de la oposición están concentrados en lograr la renovación total del Consejo Nacional Electoral (CNE), garantías y observación internacional.
«La decisión de la unidad es generar y buscar condiciones para que haya elecciones libres, y un primer paso tener un nuevo CNE porque en sí mismo no es una garantía de unos comicios limpios. Hacen falta garantías, observación internacional», reiteró el parlamentario.
Además, señaló que para lograr que el país salga de su crisis actual se necesita de una elección presidencial, «esto no es un problema que se resuelve con cualquier elección porque es mucho más profundo y más grave que eso».
Las elecciones no serán la solución pero sí un primer paso para ello, destacó González durante su intervención, por lo que «tomar una decisión ahorita de ir o no ir a un proceso electoral es un poco irresponsable porque hay consecuencias que deben ser evaluadas completamente».
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También dijo que hay un tema de legitimidad con las parlamentarias «y es que ésta Asamblea Nacional funciona hasta el 4 de enero de 2021. Entonces eso nos puede poner en aprietos sobre la legitimidad e incluso del apoyo internacional que hemos recibido. Esto nos va a poner en aprietos. No es una simple cuestión de ir o no ir a esos comicios».
Sobre la instalación del Comité de Postulaciones Electorales, al cual pertenece, González dijo que tienen la «firme convicción de lograr que los venezolanos podamos elegir libremente, hemos puesto todo nuestro esfuerzo para ello. Hemos cumplido con los pasos que dice la ley y estamos generando que hay un acuerdo político».
Ahora, según el diputado, queda de parte del bloque del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) reconocer la representación de la AN bajo la presidencia de Juan Guaidó. «Hoy es el PSUV el que tiene que destrancar este juego y poner de su parte».
Acuerdos que importan
Ramón Guillermo Aveledo, presidente del Instituto de Estudios Parlamentarios Fermín Toro, destacó durante su intervención la necesidad de que los ciudadanos perciban el sistema electoral «como lo suficientemente transparente para que sientan que su voto de verdad va a contar en esta situación».
En la misma línea que Stalin González, el dirigente opositor reconoció que este año corresponden las elecciones parlamentarias «pero tampoco van a resolver la crisis política, porque nos deben otras elecciones como las presidenciales que hasta los mismos candidatos de 2018 desconocieron».
Considera que en el país se deben realizar «elecciones que sirvan y que sean políticamente necesarias» para superar la crisis. Por ello, Aveledo señaló que «más temprano que tarde» serán necesarios los acuerdos políticos para lograr este escenario. «Yo aspiro que esos acuerdos vengan antes del desastre».
Este acuerdo a su juicio debe tener una base amplia, lo que implica «negociar con gente que no nos gusta, porque un acuerdo como estos no puede venir de una imposición de una parte hacia otra».
Destacó que entre las posibilidades existentes «está el avance de la escogencia de nuevos rectores del CNE dentro de la Asamblea Nacional. Esto implica es que hubo acuerdo, se estaban hablando y eso no se ve. Yo prefiero mil veces que hablen a que se caigan a tiros. Pero mientras tenemos más represión, nuevos diputados presos por el discurso radical de algunos sectores».
Confianza al elector
Félix Seijas, director de la encuestadora Delphos y analista político, destacó en el foro «Escenario electoral 2020» que actualmente la población se encuentra «en un momento en que el principal problema, más allá de la apatía, es que existe un sistema corrupto que controla el poder».
La existencia de ese sistema corrupto es la principal causa para desmotivar el voto, considera Seijas, por lo que la principal tarea de la dirigencia opositora es «transmitir ese deseo a votar, de que las elecciones valen la pena, es convencer a una población que tiene muchos años escuchando que la trampa es grande».
El analista político reonoció que en el sistema electoral venezolano «existe trampa incluso antes de apretar el botón de la máquina, pero tiene un límite porque no puede ir más allá de cierto punto. Ese mito de que el gobierno o Tibisay Lucena pueden hacer lo que les da la gana no es cierto, pero son difíciles de ver».
Más allá de esa trampa, que usa el régimen de Nicolás Maduro para desmotivar al elector opositor, es la participación de su propia base electoral la que impulsa al chavismo en las elecciones, destacó Seijas. Según los últimos sondeos realizados por la encuestadora Delphos, existe un 25% del padrón electoral (entre cuatro y cuatro millones y medio de votantes) que pertenecen al oficialismo.
«Juan Guaidó sigue siendo un importante referente opositor. Si él y los partidos no llaman a votar, terminará participando un 35% del padrón electoral incluso la oposición diciendo que no se vaya a votar. Un 25% serían votos oficialistas, que están y existen», refirió Seijas.
De existir un llamado a participar en elecciones dentro de las filas opositoras, la proporción de votantes aumentaría a un 55%, «lo que daría elecciones más parejas» según el analista, pues se equipararía el voto oficialista.
Las estimaciones de Delphos también arrojan que en un escenario de elecciones parlamentarias, se podría tener una participación del 75% del Registro Electoral, mientras que en unos comicios presidenciales podría aumentar diez puntos más.
El otro 20% nunca ha respondido a un liderazgo, explicó Seijas, «sino a un deseo de solventar sus problemas vitales y no le pertenece a la oposición, aunque no son fieles a ninguna estructura».
El analista recomendó además un cambio dentro del discurso opositor, pues las elecciones «no pueden ser contempladas como un fin en sí mismo, sino como herramientas de lucha para el cambio político y salir de la crisis. La clase política debe recuperar la confianza de la población y eso pasa por una comunicación transparente para que al tratar de transmitir el tema electoral, el panorama cambie».
