Súmate denuncia que simulacros desnudaron ventajismo oficialista y complacencia del CNE
Súmate denunció que los simulacros de las parlamentarias desnudaron el ventajismo oficialista y la complacencia del CNE. El 15 de noviembre se observó el uso de los “jefes de calle”, encargados de la distribución de los CLAP, para coordinar la movilización selectiva de ciudadanos
Súmate denunció que los simulacros de las elecciones parlamentarias desnudaron el ventajismo oficialista y la complacencia del Consejo Nacional Electoral (CNE). La Organización No Gubernamental (ONG) presentó un informe sobre los ensayos comiciales del 25 de octubre y el 15 de noviembre en los que, señaló, hubo un abreboca de los abusos que habrá en la contienda del 6-D.
Dentro de las incidencias registradas por Súmate en los simulacros figuran la vinculación directa en la campaña electoral de altos funcionarios públicos como gobernadores, alcaldes y personal directivo de empresas y organismos del Estado, así como el uso de los recursos y bienes del patrimonio público, la entrega de las bolsas de alimentos de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), y la aplicación de mecanismos de control social como el Carnet de la Patria.
La ONG denunció que estas prácticas ventajistas se reeditan mientras el CNE, designado por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), guarda silencio. De esa manera, no solo se vulnera la Constitución, también se incumplen los artículos 7, 13, 18, 56 y 70 de la Ley Contra La Corrupción; el artículo 75 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales (Lopre) los artículos 221 y 257 del Reglamento General de la Lopre.
En el primer simulacro, el 25 de octubre, «en 51,14% de los centros de votación habilitados se constató el uso de recursos del patrimonio público en los ámbitos nacional, regional y/o municipal para la movilización de ciudadanos. Incluso hubo reportes específicos de que en cuatro centros de votación se evidenció el uso de recursos asociados a la Fuerza Armada Nacional (FAN) para la movilización de ciudadanos».
Los Puntos Rojos del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) fueron desplegados en 80,7% de los centros pilotos y en 77,3% de los centros no pilotos. El partido del gobierno de Nicolás Maduro también constató la efectividad del carnet de la patria, el cual fue requerido en 52,2% de de los centros pilotos y el 54,7% de los centros no pilotos.
Asimismo, en el ensayo electoral del 25 de octubre, la campaña electoral fue la norma. De esta manera, se hizo campaña en 82,5% de los centros pilotos y en el 73,6% de los centros no pilotos. «Esto estaba prohibido expresamente por el artículo 75 numeral 1 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales, ya que ocurrió fuera de lapso establecido por el CNE», advirtió Súmate.
Súmate confirmó ventajismo
En el informe de la ONG se deja constancia de que «la inacción del CNE como Poder Electoral en el primer simulacro del 25 de octubre, al no abrir averiguaciones administrativas ni haber aplicado sanciones a los actores políticos y funcionarios públicos que transgredieron lo establecido en la normativa electoral sobre campaña y propaganda electoral, condujo que los abusos se incrementarán. Así sucedió en el segundo simulacro del 15 de noviembre».
En ese último simulacro, se observó el ofrecimiento de cajas CLAP a electores para que participaran en esta actividad. Esto fue registrado en el 37,9% de los centros de votación pilotos y en el 35,1% de los centros no pilotos. Nuevamente hubo propaganda electoral y proselitismo en en 84,2% de los centros de votación pilotos y en 80,7% de los centros no pilotos.
La propaganda no solo fue hecha por el gobierno. Según Súmate, «otros partidos diferentes al PSUV también realizaron actividades políticas en el 31,6% de los centros de votación pilotos y en el 28,4% de los centros no pilotos».
Un aspecto importante, dado que las parlamentarias del 6-D se realizarán en tiempos de pandemia, fue que los funcionarios electorales no usaron correctamente el tapabocas como medida de protección ante el covid-19. Esto se reportó en 26,6% de los centros pilotos y en el 30,7% de los centros no pilotos.
«No se cumplió con la medida de distanciamiento físico como prevención a los contagios por covid-19 en 67,8% de los centros pilotos y en 74,5% de los centros no pilotos», informó Súmate.
Por otra parte, en el simulacro del 15 de noviembre se observó una tendencia no vista anteriormente: el uso de los llamados “jefes de calle” (encargados de la distribución del CLAP), «para coordinar la movilización selectiva de ciudadanos hacia el simulacro, utilizando ‘cuotas’ asignadas por el PSUV, en lo que pudiera ser considerado un acto de coacción e intimidación asociado a la suspensión de los beneficios CLAP».
En los simulacros del 25 de octubre y el 15 de noviembre, Súmate reportó un incremento de 32,4% en los centros de votación donde se pudo verificar la movilización de electores utilizando bienes y recursos del estado.
Para la observación de ambos simulacros, la ONG contó con 958 voluntarios que se desplegaron en la totalidad de los 55 centros de votación pilotos y en 297 de los 376 centros no pilotos habilitados por el CNE en el 25 de octubre. En el segundo simulacro, el 15 de noviembre, Súmate logró observar los 55 centros pilotos y 226 de los centros no pilotos.