¿Tiene Donald Trump un plan en materia económica?, por Ángel Monagas

Análisis: ¿Está Donald Trump cumpliendo las promesas hechas durante la campaña electoral en materia económica?
Empecemos por revisar su mandato anterior.
En el periodo del 2016-2020 Donald Trump hizo numerosas promesas centradas en temas clave como inmigración, economía, comercio, seguridad nacional y política exterior.
En inmigración ofreció la construcción de un muro en la frontera con México y que este país pagaría por él.
Allí hubo un cumplimiento parcial. Se construyeron más de 700 km de barreras nuevas o renovadas, pero México no pagó por el muro. El financiamiento provino mayormente del presupuesto federal estadounidense y reasignaciones militares.
Como medidas adicionales implementó políticas de inmigración restrictivas, como la separación de familias en la frontera y la política de «Permanecer en México».
En economía y empleo la promesa hizo énfasis en recuperar empleos industriales y fortalecer el «Made in America».
Allí el cumplimiento parcial. Hubo crecimiento económico hasta 2020, con bajo desempleo y repunte manufacturero, aunque el crecimiento del empleo no se concentró únicamente en la industria. La pandemia de covid-19 interrumpió esa tendencia.
Paralelamente en materia de reforma fiscal aprobó una importante reducción de impuestos en 2017, especialmente para empresas y altos ingresos.
En reiteradas oportunidades habló de renegociar tratados injustos como el Tlcan y lo hizo dando lugar al T-MEC (Usmca) con México y Canadá. Vale decir que también impuso aranceles a productos chinos, lo que desencadenó una guerra comercial con China.
1. Promesas actuales (Campaña 2024-2025)
En su campaña, Trump renovó algunas promesas del pasado y ha añadido nuevas propuestas. Entre ellas:
-Expulsar a migrantes indocumentados mediante deportaciones masivas.
-Militarizar la frontera.
-«Acabar con el Estado profundo» y reestructurar el gobierno federal.
-Tomar acciones duras contra el crimen y el narcotráfico, incluso proponiendo la pena de muerte para narcotraficantes.
-Imponer aranceles universales del 10% a todas las importaciones.
Hasta aquí podemos resumir:
Durante su presidencia (2016–2020), Donald Trump cumplió parcialmente muchas de sus promesas, especialmente en áreas como comercio, inmigración y reducción de regulaciones. Sin embargo, otras quedaron sin concretar o fueron solo parcialmente implementadas, como la reforma sanitaria o la financiación del muro. En cuanto a su campaña actual, muchas promesas están en plena ejecución, pues es muy corto el tiempo para evaluar su avance.
Desde que asumió su segundo mandato en enero de 2025, el presidente Donald Trump ha implementado varias de las promesas arancelarias que formuló durante su campaña de 2024. Detalló algunas de las acciones más destacadas:
2. Imposición de aranceles a México, Canadá y China:
-México y Canadá: El 1 de febrero de 2025, Trump firmó una orden ejecutiva imponiendo aranceles del 25% a todas las importaciones provenientes de México y Canadá, con excepción de los hidrocarburos canadienses, que fueron gravados al 10%. Esta medida se justificó como un esfuerzo para reducir el tráfico de fentanilo y abordar preocupaciones migratorias.
-China: En la misma orden, se estableció un arancel adicional del 10% a las importaciones chinas, continuando con la postura proteccionista hacia este país.
3. Amenaza de aranceles del 100% a vehículos importados de México:
En septiembre de 2024, durante la campaña, Trump amenazó con imponer aranceles del 100% a los automóviles importados desde México, buscando incentivar la producción nacional y desincentivar la deslocalización de fábricas.
4. Aranceles adicionales y medidas recientes:
-Aranceles universales: El 2 de abril de 2025, Trump anunció un arancel universal del 10% sobre todas las importaciones a Estados Unidos, además de tarifas más elevadas para 60 países específicos.
-Aranceles al acero y aluminio: El 12 de marzo de 2025, se impusieron aranceles del 25% a todas las importaciones de acero y aluminio, con el objetivo de fortalecer la producción nacional.
-Orden Ejecutiva 14245: El 24 de marzo de 2025, Trump firmó la Orden Ejecutiva 14245, imponiendo un arancel del 25% a todos los bienes importados de países que compren petróleo venezolano, buscando presionar a Venezuela y a sus socios comerciales.
Estas acciones reflejan el compromiso de Trump con las políticas proteccionistas que promovió durante su campaña. Sin embargo, han generado tensiones comerciales significativas con aliados y socios comerciales, provocando represalias y afectando las relaciones internacionales de Estados Unidos.
¿Tiene Donald Trump un plan en materia económica?
Sí, y se puede resumir en estos pilares:
Proteccionismo comercial agresivo
Trump ha cumplido sus promesas de campaña de elevar aranceles, una estrategia que busca proteger la industria y manufactura nacional. Ejemplos claros:
Arancel universal del 10% sobre todas las importaciones.
Aranceles del 25% a productos de México, Canadá y China.
Aranceles del 100% amenazados para automóviles fabricados fuera de EE.UU.
Penalización arancelaria a países que importen petróleo venezolano.
Objetivo declarado: Incentivar la producción nacional, reducir el déficit comercial, y debilitar economías consideradas “hostiles” o “ventajistas”.
Crítica común: Puede provocar represalias, encarecimiento de productos para los consumidores estadounidenses, e inflación.
Todo este movimiento busca objetivos muy claros. Entre otros la reindustrialización de EE.UU.
Trump insiste en traer de vuelta fábricas que han sido trasladadas a Asia o América Latina.
Ha vinculado esto con desincentivos fiscales para empresas que produzcan fuera y beneficios para quienes se «relocalicen» en EE.UU.
El objetivo: Fortalecer el empleo industrial, revivir zonas deprimidas del «Rust Belt» y minimizar la dependencia de China.
La próxima jugada de Trump, tocara una reducción de impuestos y desregulación
Aunque aún no ha anunciado una nueva reforma fiscal, su historial sugiere que buscará:
Reducción de impuestos a empresas.
Eliminación de regulaciones ambientales y laborales consideradas «obstáculos al crecimiento».
La crítica radica en que con esto, favorece a grandes empresas y puede aumentar el déficit fiscal.
Gasto en defensa y fronteras, no en bienestar social
Su enfoque económico prioriza el gasto militar, infraestructura fronteriza y seguridad sobre salud o educación pública. No ha planteado ampliaciones significativas a las redes de protección social.
Uso político de la política económica
Las decisiones arancelarias o fiscales están, en muchos casos, orientadas a presionar países rivales o aliados incómodos, como México, China o incluso Europa.
Como ejemplo, tenemos la orden ejecutiva que penaliza a países que compren petróleo a Venezuela.
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Conclusión
A mi juicio, Donald Trump sí tiene un plan económico: nacionalista, proteccionista y enfocado en la autosuficiencia industrial.
Está ejecutando ese plan desde el inicio de su segundo mandato con acciones concretas, especialmente en el área de comercio. Lamentablemente, los efectos a mediano y largo plazo aún están por verse, y las consecuencias podrían incluir tensiones internacionales, inflación o incluso represalias comerciales.
Entonces, nos preguntamos ¿Por qué tomó una medida arancelaria y después la difirió?
Muchos dudamos de la existencia de un plan, ante tal medida.
Consulto a varios especialistas republicanos y me aducen que la decisión del presidente Donald Trump de imponer aranceles y luego posponerlos se debió a varios factores interrelacionados:
Reacción negativa de los mercados financieros: Tras el anuncio inicial de aranceles significativos, los mercados bursátiles experimentaron caídas pronunciadas. El índice S&P 500, por ejemplo, cayó un 12% en cuatro días, reflejando la preocupación de los inversores sobre las posibles repercusiones económicas de una guerra comercial ampliada.
Presión de líderes empresariales y aliados internacionales: Figuras prominentes del sector empresarial, como Elon Musk y Bill Ackman, expresaron su inquietud por el impacto negativo de los aranceles en la economía estadounidense. Además, más de 75 países manifestaron su preocupación, lo que llevó a Trump a reconsiderar la implementación inmediata de las tarifas.
Impacto potencial en la industria automotriz: La imposición de aranceles del 25% a vehículos y autopartes importados desde México y Canadá generó alarma en la industria automotriz estadounidense. Se estimaba que tales medidas podrían reducir la producción de vehículos en América del Norte en un 33%, afectando negativamente el empleo en plantas de manufactura y empresas proveedoras.
Una observación que vale la pena hacer es la respuesta a todo este panorama:
El objetivo es centrarse en China: Al posponer los aranceles para otros países, Trump pudo dirigir su atención hacia China, aumentando los aranceles a las importaciones chinas al 125%. Esta estrategia busca intensificar la presión sobre Beijing en medio de crecientes tensiones comerciales.
A confesión de parte, relevo de pruebas: Las declaraciones del presidente Trump mencionaron que la pausa en los aranceles respondía a que «la gente se estaba poniendo nerviosa» y enfatizó que ningún otro presidente había tomado medidas comerciales tan audaces.
En Conclusión: La combinación de la volatilidad del mercado, la oposición de líderes empresariales, las preocupaciones de aliados internacionales y el deseo de focalizar las medidas en China influyeron en la decisión de Trump de diferir ciertos aranceles tras su anuncio inicial.
Ángel Monagas es abogado y comunicador.