Venezuela es el segundo país de la región con menos medidas para prevenir abuso infantil
De acuerdo con el informe Índice Fuera de las Sombras, publicado por Economist Impact, Venezuela tiene brechas significativas en la legislación para proteger a niños, niñas y adolescentes de la explotación y el abuso sexual y que carece de mecanismos de compensación para víctimas, «lo que es un punto débil grave»
Venezuela es el segundo país de Latinoamérica que cuenta con menos medidas de prevención contra el abuso infantil. Así lo evidenció el último informe Índice Fuera de las Sombras, que analiza el desempeño de 60 países a la hora de abordar los casos de explotación y abuso sexuales contra niños, niñas y adolescentes.
De acuerdo con el informe, publicado el 7 de marzo por Economist Impact, «de los 60 países que se incluyen en el índice Fuera de las sombras, Venezuela se encuentra en el puesto 47 a nivel global, con una puntuación de 43,8 sobre el máximo posible de 100″.
*Lea también: MP contabiliza siete detenciones por abuso sexual en lo que va de enero
En la publicación se destacó que el Estado venezolano dejó caducar el Plan de Acción Nacional contra la Explotación y Abuso Sexual de Niños, Niñas y Adolescentes.
«El país tiene brechas significativas en la legislación para proteger a niños, niñas y adolescentes de la explotación y el abuso sexuales. Por ejemplo, en la legislación venezolana no se castiga específicamente la producción, reproducción o posesión de material de abuso sexual de niños, niñas y adolescentes, aunque se prohíbe la divulgación, distribución o venta. Tampoco prohíbe explícitamente la exposición intencionada de niños, niñas y adolescentes a actos sexuales», se lee en el informe sobre Venezuela.
Basándose en datos aportados por el Ministerio Público, en los primeros 10 meses del 2022 se registraron 1.024 casos de abuso infantil. En el informe se advirtió que «una legislación explícita es clave para evitar ambigüedades con respecto a qué constituye un delito».
Falta educar a funcionarios sobre abuso infantil
El informe Índice Fuera de las Sombras destacó que Venezuela, junto a Perú, tiene la puntuación más baja de la región en cuanto a la capacitación de jueces y fiscales sobre los traumas o el abuso infantil. Agregó que el país carece de mecanismos de compensación para víctimas, «lo que es un punto débil grave».
En cuanto a la educación sobre explotación y abuso sexual, no hay pruebas de que se aborde de forma adecuada en los programas escolares. «Esta situación deja a los niños, niñas y adolescentes sin las herramientas necesarias para identificar riesgos o buscar ayuda».
En el documento se calificó de «acciones positivas» el hecho de que se haya establecido el consentimiento sexual a partir de los 16 años de edad y que la nación se convirtiera en uno de los pocos países de la región en eliminar los plazos de prescripción en los casos de violencia sexual.
«En Venezuela, esto ocurrió en octubre de 2021 mediante la Ley para la Prevención y Erradicación del Abuso Sexual Contra Niñas, Niños y Adolescentes. Esta reforma permite denunciar su caso a víctimas y sobrevivientes cuando se sienten preparados para ello, ya que muchos, a causa del trauma, pueden tardar hasta décadas en develar los abusos sufridos», se lee en el informe.
El informe destacó «85% de niños, niñas y adolescentes del mundo reside en los países que cubre este informe». América Latina está por debajo de la media global en cuanto a leyes que protegen y responden a la violencia sexual contra niños y niñas y, además, lo hace de forma muy desigual incluso dentro del mismo país, lo que debilita la protección.
La clasificación de los países de América Latina y el Caribe incluidos en el índice fue la siguiente: Brasil (1° a nivel regional; 11° a nivel mundial), México (2° a nivel regional; 12° a nivel mundial), Guatemala (3° a nivel regional; 17° a nivel mundial), Colombia (4° a nivel regional; 19° a nivel mundial), Jamaica (5° a nivel regional; 20° a nivel mundial), El Salvador (6° a nivel regional; 21° a nivel mundial), Perú (7° a nivel regional; 46°a nivel mundial), Venezuela (8° a nivel regional; 47° a nivel mundial) y Argentina (9° a nivel regional; 50° a nivel mundial).