Venezuela perdió $18,4 millones diarios en 2022 por gas arrojado a la atmósfera
El gas arrojado a la atmósfera por Pdvsa alcanzó en 2022 un volumen de 1.715 MPCD, equivalente al 56,5% del gas asociado producido en el país, según cálculos de consultores privados. Estiman además que la producción de este hidrocarburo durante el pasado año fue similar a la de 1988
Venezuela dejó de percibir 18,4 millones de dólares diarios por la quema y venteo de gas en 2022. De acuerdo a cálculos del ingeniero en petróleo Nelson Hernández, el gas arrojado a la atmosfera alcanzó un volumen de 1715 millones de pies cúbicos diarios (MPCD), equivalente al 56,5% del gas asociado producido en el país.
El país está retrasado en el cumplimiento de las acciones para honrar sus compromisos de disminuir las emisiones de los gases responsables del cambio climático. Esto se evidencia en las impresionantes llamas en los mechurrios de Pdvsa, por donde se expulsan al ambiente millones de toneladas de gas cada año. Analistas han explicado que con el plan de siembra petrolera que impulsó la producción de crudo pesado en la Faja del Orinoco, ubicó a la estatal en los primeros lugares de las petroleras más contaminantes del mundo.
Explicó Hernández que para esta estimación de los recursos que pierde el país se multiplicó el volumen de gas arrojado al ambiente el cual equivale a 281.000 barriles diarios de petróleo, por el precio promedio del crudo venezolano Merey 16 de 65,6 dólares el barril.
«Al igual que el gas de inyección, la infraestructura para el manejo del gas producido esta deteriorada, lo cual conlleva a la quema de ese gas, considerándose esto como un crimen económico y ecológico», afirmó el experto en energía en un reciente informe.
Parte del gas asociado producido con el petróleo por limitaciones técnicas, económicas o regulatorias no consigue una utilización apropiada, lo que origina a una actividad rutinaria como es su arrojo a la atmósfera o su quema, siendo esta última la menos dañina al ambiente, porque la emisión es de CO2 y no de CH4 (metano) que surge del venteo. El resultado de esta quema son las miles de llamaradas de gas en los sitios de producción de petróleo en todo el mundo y en gran medida la que se observa en los mechurrios de Pdvsa en el estado Monagas.
Recordó Hernández que en Venezuela existe una norma (que no se aplica) que establece que el gas arrojado a la atmosfera no debe ser mayor al 2% del gas producido, por lo que el porcentaje actual de 56,5% supera con creces esta disposición.
Desde hace varios años, la industria venezolana de los hidrocarburos presenta una serie de problemas operativos debido a la falta de mantenimiento de sus instalaciones. Esta situación ha ocasionado desde derrames de crudo en tierra y mar hasta la expulsión a la atmósfera de grandes volúmenes de gases contaminantes, que afectan al clima, a las áreas agrícolas y pesqueras y hasta la salud de los venezolanos.
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Producción de 1988
De acuerdo a los cálculos del también miembro de la Academia Nacional de la Ingeniería y el Habitat, la producción de gas de Pdvsa en el año 2022 fue de 3715 millones de pies cúbicos diarios (MPCD), integrada por 3035 MPCD de gas asociado (81,7%) y 680 MPCD (18,3%) de gas no asociado.
«Es de destacar que la producción de gas del 2022 es igual a la de 1988. Por otra parte, el máximo histórico de producción de gas se alcanzó en el 2016 con 7926 MPCD. A partir de ese año cae a los niveles actuales como consecuencia de la disminución en la producción de petróleo. En lo atinente a la producción de gas no asociado su máximo histórico es de 680 MPCD alcanzado en el 2022. El mayor volumen lo aportó el campo Cardón IV (Perla) con 495 MPCD, y el resto por las licencias en tierra para producir gas no asociado», se indicó en el informe.
Del total de producción de gas del 2022, la propia industria petrolera estatal tomó 69,3% (2575 MPCD). Mientras que la distribución porcentual con respecto al volumen producido fue: 1,07% transformado en gas natural licuado (para bombonas), 2,01% mermas en las operaciones, 16,3% utilizado como combustible operacional, 3,7% en inyección de gas con fines de recuperación secundaria y 46,2% fue arrojado a la atmosfera vía quema.
«Merecen especial comentarios el gas de inyección y el gas arrojado a la atmósfera. La inyección de gas es vital para alargar la vida productiva de un yacimiento de hidrocarburos. Esta inyección se ha venido a menos como consecuencia de indisponibilidad de infraestructura para realizarla y a la aplicación de malas praxis gerenciales. El volumen inyectado en el 2022, corresponde al 4,1% del máximo histórico de 3382 MPCD ocurrido en el 2014″, destacó Hernández.
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A lo interno
Con respecto al mercado interno, el país consumió 30,7% (1140 MPCD) del total producido en 2022. Según señaló Hernández, este volumen es similar al consumido en el año 1983. La distribución porcentual con respecto al total producido es como sigue: 11,9% en el sector eléctrico (termoelectricidad), 7,9% en petroquímica, 2,9% en siderúrgica y aluminio, 1,6 % en la industria del cemento, 3,5% sector doméstico y 2,9% en la industria manufacturera.
El consumo en el mercado interno muestra una baja a partir del año 2017 de 763 MPCD con respecto al consumo de 2022, producto de la recesión económica venezolana, se destacó en el documento.
«La disponibilidad de gas es vital para la recuperación y expansión económica del país. Es necesario para aumentar la producción de petróleo, vía inyección de gas. Por su versatilidad y aplicación transversal en los procesos, el gas es clave en los sectores de producción de bienes y servicios. Es prioritario la eliminación de la quema de gas, especialmente en el oriente del país», dijo Hernández.
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