Esperando al Mesías…, por Rafael Viloria
Autor: Rafael Viloria | [email protected]
“…Mesías: enviado divino anunciado por los profetas judíos al pueblo de Israel que estableciera en la tierra al reino de Dios…”
Por estos tiempos del siglo XXI, del año 2018. Una nación relativamente joven del Continente Latinoamericano (Venezuela) se encuentra atravesando una aguda crisis social, económica, y política.
Los venezolanos en evidente situación paradójicamente por aquello del que se muere de sed en el medio del mar, de los que padecemos de hambre donde se produce suficiente comida, donde 35 millones de hectáreas de condición agrícola pecuaria piscícola avícola hortaliza y todo lo que se parezca al destino alimentario. Hoy por razones de mala praxis de gerencia pública. Hoy no son capaces de producir alimentos, ni siquiera para la alimentación doméstica. Mucho menos para el destino industrial y agroindustrial y exportación.
Aquella visión de Pérez Alfonzo y Arturo Uslar Pietri; de sembrar el petróleo, pareciera que nadie los oyó o nadie la entendió, claro que todo esto es entendible en el marco de un país que por largas trayectorias ha sido conducido por (Inútiles) políticos carentes de los más básicos conocimientos en el ejercicio de las ciencias sociales, económicas, y políticas, Es decir hemos estado en manos de la más perversa y diabólica sociedad de cómplices en la conducción del país.
En el atajo del Continente de Inútiles políticos una cosa si ha sido común: La corrupción que se origina en la desatinada actuación en el manejo de la única fuente que intenta sostener el equilibrio del sistema social económico político del país; La Industria Petrolera Venezolana.
Tal ha sido el grado de los desatinos en la conducción del país; que ello ha originado con difíciles posibilidades de un retroceso; que ahora estamos insertos en una integral crisis social económica y política, que está generando consecuencias nefastas que el país no encuentra formas, ni maneras para de ella salir. Una cosa si es común, pero difícil de entender, unos afirman que la culpa de tan nefasta situación es el Imperio Norteamericano (E.E.U.U) (El Capitalismo); otros afirman que la (culpa) es del gobierno que se empeña en intentos por promover, organizar y poner en marcha un sistema social y político, con bases en una doctrina socialista comunista contraria al capitalismo.
Hoy nuestro país intenta en medio de la crisis encontrar caminos apropiados, bajo doctrinas democráticas (Demo: poder – cracia: pueblo) que le permita instaurar un nuevo orden social económico y político, capaz de darle un viraje a la situación del país, para ellos el país ha comenzado a dar muestras insistente de esperar la presencia de un “Mesías”.
La presencia de un nuevo “Mesías” pareciera indicar que el país ha dependido siempre de la presencia de una especie de “escogido” para que conduzca por el camino del bien los destinos sociales económicos y políticos de Venezuela. Ello deja claro que los antecedentes políticos del país han estado inmersos en acciones desatinadas y por consiguiente muestran resultados claramente expuestos en lo que hoy identificamos como una perversa y diabólica crisis que está indicando la destrucción del país.
Lo importante ahora es plantear: si la crisis y sus consecuencias para salir de ella ¿Dónde está el Mesías? No pareciera fácil, si es que se puede lograr ¿cuál es su perfil? ¿Cuál debe ser su visión y misión al propósito a ser emprendido Capitalista, socialista, democrático, totalitarios cooperativista?
Todos estos planteamientos resultan débiles frente a la realidad que nosotros tenemos realmente, por consiguiente corremos el riesgo de ser utópicos en las aspiraciones de que para salir de la situación aguda y compleja solo depende de la presencia de un Mesías.
El gran problema que los venezolanos tenemos que resolver es que tenemos definitivamente que despertar, reaccionar y actuar, quien depende no es libre, por consiguiente la lucha está planteada: la libertad la que está planteada. Ello solo será posible: si tomamos conciencia de su contenido, de su propósito, si logramos entender que demo: es poder gracia: pueblo, nos pertenece a todos, podremos descubrir que es la democracia el camino que tenemos que escoger y practicar, en la instauración de la verdadera libertad social, económica y política que hará que nuestra patria vuelva a rescatar sus estatus revolucionario original que dieron nuestros libertadores que dejaron como legado,
Claro que el propósito que hay que emprender no es fácil, para ello es necesario cambiar innovar y construir entre todos el orden social, económico y político que la situación exige hoy.
Los Mesías, somos nosotros mismos.
Expresidente de Ceconave
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