Algunos «detalles» del acto de juramentación de Nicolás Maduro
Nicolás Maduro utilizó la Constitución «original» firmada por el expresidente Hugo Chávez en 1999 para su juramentación, un texto que no incluye la reelección indefinida
La mañana de este viernes 10 de enero Nicolás Maduro concretó una juramentación para un tercer mandato, pese a los serios cuestionamientos de la comunidad internacional y la propia oposición venezolana a los resultados de las presidenciales, debido a la falta de resultados detallados de esos comicios.
Como lo dicta la Constitución, que según Maduro será nuevamente objeto de reforma este año, la toma de posesión para un nuevo periodo presidencial debe hacerse el 10 de enero ante la Asamblea Nacional. Tradicionalmente, la juramentación de los mandatarios venezolanos se ha hecho en el hemiciclo de sesiones. Pero en esta ocasión el acto se hizo en el Salón Elíptico, donde se resguarda el arca del Acta de Independencia del país.
En el Salón Elíptico, que cuenta con un espacio reducido, se agruparon a diputados de la Asamblea Nacional (el parlamento cuenta con 277 integrantes principales), los mandatarios extranjeros, representantes diplomáticos e invitados especiales. Sin conocer la cantidad de parlamentarios presentes, se informó que había el quorum suficiente para iniciar la sesión solemne. Alguno de los diputados tuvieron que quedarse de pie y aunque se informó que había quórum, no se detalló cuántos realmente estuvieron presentes.
Según el propio Nicolás Maduro, recibieron delegados de 125 países, aunque buena parte de los invitados no venían representando a sus gobiernos. Varios de los asistentes eran de los invitados a la «feria antifascista» que también fue convocada en Caracas.
Entre los gobernantes que acudieron se contaron apenas los de Cuba (Miguel Díaz-Canel), Nicaragua (Daniel Ortega), Antigua y Barbuda (Gaston Browne), la República Árabe Sarahaui Democrática, San Vicente y Las Granadinas (Ralph Gonsalves). También saludó a enviados especiales de Rusia y China, así como representantes del empresariado venezolano como Luigi Pisella, presidente de Conindustria.
Entre los asistentes al acto estuvo una representación reducida de la familia del expresidente Hugo Chávez, su mentor político. Asistieron el exministro Adán Chávez y la hija menor y presidenta de Inparques, Rosinés Chávez Rodríguez.
La presencia de periodistas también fue prácticamente nula, debido a que la transmisión fue controlada por Venezolana de Televisión. A la prensa acreditada se le informó que solo fotógrafos y camarógrafos podrían ingresar a la Asamblea Nacional. El resto sería dejado en un salón del Palacio de Miraflores para observar el acto en un monitor. Algunos decidieron retirarse. Los técnicos que fueron llevados hasta el Palacio Federal Legislativo tampoco pudieron entrar al Salón Elíptico y debieron esperar en las escalinatas de afuera. Dentro del salón solo hubo cámaras para la transmisión oficial controlada por el Minci.
Otro detalle fue la propia juramentación. Maduro utilizó la Constitución «original» firmada por el expresidente Hugo Chávez en 1999. En ese texto, por ejemplo, no está contemplada la reelección indefinida.
Entre algunas descalificaciones, Maduro también se permitió bromear sobre Edmundo González. Al escuchar un ruido preguntó: «¿Llegó Edmundo? Recójanlo, alguien se cayó por ahí (…) como lo estoy esperando. Estoy nervioso».
González Urrutia no viajó al país este viernes, como durante semanas dijo que tenía previsto, por el cierre del espacio aéreo y petición expresa de la propia María Corina Machado para garantizar su integridad física, luego de que ella misma fuese detenida arbitrariamente y liberada la tarde del 9 de enero.
*El periodismo en Venezuela se ejerce en un entorno hostil para la prensa con decenas de instrumentos jurídicos dispuestos para el castigo de la palabra, especialmente las leyes «contra el odio», «contra el fascismo» y «contra el bloqueo». Este contenido fue escrito tomando en consideración las amenazas y límites que, en consecuencia, se han impuesto a la divulgación de informaciones desde dentro del país.
