Altos niveles de delincuencia son responsabilidad del régimen, reitera AI

Amnistía Internacional recordó que en 2018 publicó un informe donde se determina la responsabilidad del Estado venezolano en la violación del derecho a la vida y a la integridad personal
La organización no gubernamental Aministía Internacional (AI) reiteró la responsabilidad del Estado venezolano y, en particular, del régimen de Nicolás Maduro en los altos niveles de violencia que se viven en el país.
Durante el foro «Seguridad Ciudadana y la vida urbana», Natalia Gan, coordinadora del proyecto Reingeniería de la Seguridad Ciudadana, recordó que la ONG publicó mundialmente en septiembre de 2018 el informe “Esto No es Vida” donde se determina la responsabilidad del Estado venezolano en la violación del derecho a la vida y a la integridad personal de cientos de víctimas.
El Estado es responsable de los altos índices de violencia en dos niveles. El primero radica en su incapacidad para garantizar el derecho a la vida en contexto de violencia entre particulares y el segundo se centra en la implementación de medidas represivas para atender la delincuencia, lo cual ha ocasionado graves violaciones a derechos humanos y en especial un número alarmante de ejecuciones extrajudiciales”, explicó Gan.
Para la especialista, la violencia es un fenómeno que afecta la vida de miles de venezolanos desde hace décadas, aunque en el contexto actual de emergencia humanitaria compleja ha agudizado la crisis de derechos humanos consolidándose como un factor adicional de la migración.
José Luis Fernández-Shaw, sociólogo y especialista en violencia armada, indicó que la opacidad del Estado venezolano en la recolección y publicación de cifras sobre las muertes violentas en el país es una constante en todas las instituciones y un problema para analizar las causas de la violencia.
Por esto, señaló que es urgente un «sistema integrado de vigilancia de la violencia, donde los datos sean sistemáticos, consistentes y oportunos para la creación de políticas que reduzcan los índices de violencia».
De acuerdo con información disponible, la gran mayoría de las víctimas de la violencia armada son hombres, jóvenes y en situación de pobreza. Fernández-Shaw insistió que urge el diseño y la implementación de una política pública que le dé oportunidades a la población joven con la cual puedan construir proyectos de vida alejados de la criminalidad.
Sobre la violencia con enfoque de género, el especialista alertó que Venezuela tiene la tercera tasa más alta de la región de muertes violentas de mujeres. “Si bien, la tasa es menor en comparación con los hombres, es muy elevada si nos comparamos con otros países”.
Por su parte, la arquitecta e investigadora del proyecto «Crecimiento de la cultura ciudadana, seguridad e integridad física», Carmen Ofelia Machado, resaltó que actualmente se fomenta una nueva y caótica forma de vida urbana sujeta al control del territorio tanto por organismos de seguridad como por bandas armadas.
Considera que para «reconciliar» a las personas con su ciudad y sus espacios, se deben implementar políticas públicas integrales en torno a la vivienda y programas de inclusión especialmente en los barrios y sectores más vulnerables.
Resaltó que es necesaria la recuperación de la cotidianidad de la vida en la ciudad, ya que las personas por miedo a ser víctimas de la violencia han dejado de disfrutarla, lo cual constituye también una limitación a sus derechos.
Con información de nota de prensa