Cristopher Figuera: Caso de Acosta Arévalo es una advertencia de Maduro a la disidencia
El exfuncionario aseveró que Maduro es quien da la orden de torturar a militares que son acusados de conspiración. En este sentido, Figuera detalló que dentro de los organismos de seguridad «hay personas que le tributan para casos específicos»
El general Manuel Cristopher Figuera, exjefe del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), rechazó las condiciones en las que se realizó el entierro del capitán de corbeta Rafael Acosta Arévalo, fallecido por presuntas torturas que habría recibido mientras estuvo detenido en la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim).
En entrevista a VPI Tv, el exfuncionario del Sebin culpó a Nicolás Maduro por la muerte del capitán, con la cual se quiso enviar un mensaje de advertencia a todas las personas a toda la disidencia.
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El exfuncionario aseveró que Maduro es quien da la orden de torturar a militares que son acusados de conspiración. En este sentido, detalló que dentro de los organismos de seguridad «hay personas que le tributan a Maduro para casos específicos» y también que hacen contrainteligencia y están al pendiente de lo que hacen los jefes.
Cristopher Figuera aseveró que mientras estuvo a cargo del Sebin no hubo un solo caso de tortura, y pudo darse cuenta que Maduro no era ajeno a lo que pasaba, como lo llegó a creer en sus primeros meses al frente del organismo de inteligencia.
» Yo llegué a pensar que Maduro era inocente de cosas que pasaban, pero cuando tuve acceso a él me di cuenta que no había voluntad de cambiar y de los desastres de la administración», agregó.
Relató que mientras estuvo en el Sebin pudo conversar con personas que le comentaron cosas que no sabía, entre ellos el general Juan Carlos Caguaripano, que llegó «muy maltratado». Aunque afirmó que le mandó a hacer exámenes para verificar su estado de salud manifestó que no pudo hacer nada para ayudarlos porque esos actos ocurren de forma aislada. Cristopher Figuera presume que son funcionario que dan aviso a servidores de Maduro de que ya tienen detenido a la persona que desea el Ejecutivo.
Los torturadores
Aseguró no conocer el perfil que debía tener una persona para torturar. Sin embargo, detalló que conoce de situaciones en las que mujeres han participado en estos hechos. Se basó en las declaraciones que obtuvo de una mujer que le dijo que no podrá superar lo que vivió dentro del Sebin, porque «habían funcionarias que abusaron sexualmente» de más de una de las detenidas.
Cuando se le preguntó por nombres de «eventuales torturadores», Figuera mencionó al coronel Franco Quintero, al mayor Granko, al comisario Calderón y Mucura, quien por cierto formaba parte del equipo que custodiaba al concejal Fernando Albán, quien falleció al «caer» del décimo piso de la sede del organismo en Plaza Venezuela.
Develó que cuando se detuvo al presidente de la Asamblea Nacional (AN), Juan Guaidó, en la autopista Caracas-La Guaira él ordenó su liberación, pues no estaba contemplada la detención del máximo representante del Parlamento.
Detalló que Maduro le ordenó detener a alguien cercano de Guaidó con el objetivo de quebrar «la voluntad de lucha», entre las personas que asegura le sugirió el Ejecutivo apresar fue a la madre del diputado. Sin embargo, Figuera afirma que se negó.
El exjefe del Sebin también se refirió a las mesas de diálogo a las que el gobierno dice estar dispuesto a acceder para procurar la paz del país. A su juicio, Maduro usa el diálogo para perpetuarse en el poder, incluidos los nuevos encuentros que ambas partes sostienen en Barbados.
«Maduro usa el diálogo para ganar tiempo y junto con el equipo de Jorge Rodríguez hacer creer al mundo que es un hombre de diálogo», agregó.
El madrugonazo
Cristopher Figuera afirma que lo ocurrido el 30 de abril es un proceso que aún está en marcha. Asimismo manifiesta sentirse orgulloso de haber participado en el madrugonazo militar contra el gobierno, en el que se logró la liberación del líder del partido político Voluntad Popular (VP), Leopoldo López.
«Me siento orgulloso de haber dado ese paso y de lo que sí me arrepiento es de haber sido parte de una empresa criminal. No se justifica que niños mueran por falta de insumos y que millones de personas se hayan ido del país», expresó.
Cuando se le preguntó por cuál fue la parte del plan contra Maduro que falló, enfatizó que fue la ambición desmedida del presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Maikel Moreno, quien «venía de un proceso conspirativo con otras personas (…) Todo el mundo está conspirando».
Opinó que Nicolás Maduro «debe estar temeroso porque está consciente del desprecio que el mundo siente por él», y aseguró que el mandatario no quiere soltar el poder pese a que no confía en nadie en su entorno.
Cristopher Figuera también habló sobre los recientes nombramientos militares. En este sentido, aseguró que aunque se sabe que el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López estaba conspirando, lo ratifican en el gabinete ministerial porque «para usar una expresión sencilla, más vale bueno conocido que malo por conocer».
Destacó que Padrino López tampoco hizo lo que había acordado el 30 de abril en el madrugonazo militar.
Por otra parte, aseguró que en el desespero porque no lo aparten del poder, el gobierno fabrica pruebas para inculpar a personas de conspiradores. Culpó al ministro de Comunicación Jorge Rodríguez, de encargarse de las manipulaciones para incriminar a las personas.
Hizo referencia al informe emitido por la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, en el que denunció las vulneraciones a los derechos fundamentales que sufren los venezolanos. Ante esto, invitó a la comunidad internacional, sobre todo a los embajadores de la Unión Europea que hacen vida en Venezuela, a constatar lo expuesto en el documento.