Cuba aplicó aumentos de hasta 400% en combustible y servicios públicos pese a la crisis
En Cuba también se abrieron varias gasolineras habilitadas para cobrar en dólares mediante tarjetas de crédito internacionales y prepagadas de instituciones y bancos cubanos
Las autoridades del régimen cubano comenzaron el viernes 1 de marzo a aplicar un plan de incrementos en los precios de la gasolina de un 400% así como de otros servicios básicos. El ajusto generó comentarios negativos en la población, que vive en medio de un escenario de crisis económica.
Los ajustes están encaminados a “rectificar un grupo de distorsiones que están presentes en la economía”, dijo esta última semana de febrero el ministro de Finanzas y Precios de Cuba, Vladimir Regueiro Ale.
“Estamos hablando de la actualización de los precios minoristas de los combustibles… somos conscientes de la repercusión que tienen”, señaló el funcionario cubano.
Un recorrido de la agencia Associated Press por varias gasolineras de la Habana mostró algunas filas, aunque menos que en los días anteriores. Algunas estaciones no estaban despachando debido a que estaban actualizando precios.
Incluso, en algunas estaciones de servicio había anuncios con los diferentes precios tanto en pesos cubanos (CUP) como en dólares —al cambio de 120 por unidad—, pues también se abrieron varias gasolineras habilitadas para cobrar en dólares mediante tarjetas de crédito internacionales y prepagadas de instituciones y bancos cubanos.
“Para el pueblo no es el momento” de aplicar un ajuste, dijo a AP la jubilada de 62 años Lourdes González. “Ahora mismo la gente está con problemas y situaciones económicas fuertes”, agregó.
También se incrementaron el precio de la tarifa eléctrica para los grandes consumidores y algunos boletos de transporte para la media y larga distancia tanto de autobuses como trenes. En tanto, se ha pospuesto el aumento del balón de gas con el que muchas familias cocinan.
Las autoridades indicaron que los ajustes son necesarios debido a la suba mundial del precio de los combustibles y las dificultades para conseguirlo.
“Hay que tener una bola de cristal para saber qué va a pasar”, comentó Alexander Avilés, un desempleado de 59 años. “La crisis es total y estamos tratando de sobrevivir”.
Con información de Infobae.