El año escolar en Táchira se inició con tan solo 15% de los estudiantes
Con escasa asistencia de estudiantes, desayunos nada nutricionales y docentes esperando lineamientos para ir a un paro general de actividades, se inició el nuevo año escolar en el estado fronterizo con Colombia
Rosalinda Hernández C.
Con nada de algarabía y apenas 15% de los estudiantes, las escuelas en el fronterizo estado Táchira abrieron sus puertas para dar paso al nuevo año escolar, según reportó Gerardo Ramírez, presidente de la Federación Nacional de Trabajadores de Venezuela (Fenatv).
Las muestras del ausentismo se evidencian en toda la región. En la escuela nacional Juan Antonio Román Valecillo, ubicada en San Cristóbal, de una población de 483 alumnos solo se han inscritos 275 y éstos solo 104 asistieron al primer día de clases, precisó el subdirector administrativo Ender Robles.
“Pocos niños han asistido hoy a clase pero esperamos que en el transcurso de la semana se vayan incorporando a sus actividades. Aunque desde el año pasado ha venido disminuyendo la nómina de alumnos, debido a la situación país”, apuntó Bella Osorio, directora de la Unidad Educativa estadal Ramón Buenahora.
En esta escuela, que trabaja a doble turno y atiende desde preescolar hasta sexto grado, apenas 230 alumnos se han inscrito para iniciar el nuevo año escolar de una matrícula entre 600 y 800 estudiantes
“Los docentes asistieron en un 99%. Solo tres no llegaron porque tenían consulta médica y lo notificaron. Pero la asistencia de los niños apenas alcanzó 12%”, dijo la directora.
En las aulas de clases –precisó la profesora- el ausentismo escolar es marcado y se ha llegado a tener apenas ocho estudiantes en un aula de 25 alumnos. En algunas instituciones educativas el turno vespertino está a punto de desaparecer por falta de estudiantes, según la educadora.
Esperan el llamado a paro
El personal docente tampoco acató en su totalidad el llamado del gobierno a iniciar el año escolar. De hecho, la presencia de los educadores durante el primer día de clases fue promediada por el directivo en un 70% en toda la región, ello a pesar del llamado a paro que se venía haciendo desde la semana pasada.
Karelis Sánchez es una docente tachirense, tiene 11 años de servicio en la educación, a pesar de haber llegado bien temprano este lunes a cumplir horario, dijo que los educadores del Táchira se encuentran a la espera de recibir lineamientos de los gremios sindicales, coalición sindical y Federación Venezolana de Maestros, para ir a un paro general de actividades.
“Los docentes que nos incorporamos lo hemos hecho por vocación de servicio, porque queremos la institución y creemos en el país, pero también tenemos muchas necesidades que no han sido tomadas en cuenta ni por el gobierno nacional, ni regional. Nuestros sueldos son de 57.000 bolívares la quincena pasada y está quincena no la han cancelado. Esta es la realidad que están viviendo la mayoría de profesores del estado. Nuestra consigna es: nos pagan o nos paramos. Ojala que el paro sea a nivel nacional y no solo aquí en Táchira”.
Madrugaron
Carolina Rodríguez, representante de un estudiante del tercer grado de educación básica, comentó a TalCual que a pesar de haber llevado a primera hora a su hijo a clases, no fue hasta media mañana que empezaron las actividades, a pesar de la presencia del personal docente.
“No hay alumnos, son muy pocos los niños que llegaron al primer día de clases. Lo que espero es que este año sea mejor que el pasado, que los profesores no se vayan de paro porque es necesaria la educación para sacar adelante a nuestros niños a pesar de todo lo que pasa”.
Siento mucha tristeza, antes había alegría y los niños corrían de un lado a otro, ahora todo se acabó”, dijo la representante
Otra representante, Claudia Vargas, exaltó la labor de los docentes, pero echó de menos la presencia de los estudiantes. “La afluencia de niños es muy poca, no sé si se debe a los reportes que daban hace una semana donde se llamaba a un paro”.
Pocas exigencias
Como el año anterior, para el presente período a los estudiantes se les ha facilitado la entrada a las aulas sin el respectivo uniforme y sin la lista completa de útiles escolares.
“El uniforme y zapatos que tiene mi hijo hoy es el del año pasado. Los útiles no los pude comprar todos, busque mejores precios en los negocios de los chinos porque en las librerías todo es más costoso. Los docentes nos han dicho que se traiga lo que podamos, no es obligación traer toda la lista. Todo ha cambiado”, dijo la madre de un estudiante de tercer grado.
A pesar de no cancelarse matricula ni exigirse ninguna obligación económica, los representantes de las escuelas públicas debieron contribuir con artículos genéricos de limpieza para apoyar el mantenimiento del recinto; mientras que los docentes, por su parte bajaban los bombillos fluorescentes para mandarlos a reparar ante la oscuridad que se vive en las aulas
“El año escolar se inició con el programa de alimentación. A los niños se les dio desayuno: deditos de harina de maíz dulce fritos. Para mañana ya salen almuerzos”, comentó uno de los docentes consultados.
Las fallas en el transporte público y escasez de dinero en efectivo son atenuantes que se suman al ausentismo escolar y motivo de reclamo para los docentes. Al respecto, a las afueras de la Zona Educativa Táchira, se aglomeraron desde tempranas horas del día un grupo de al menos 30 docentes que protestaban por mejores salarios, además del cumplimiento del contrato colectivo que se firmó en abril del año pasado y aun no se implementa.