Está asustado, por Simón Boccanegra
Chacumbele habló de todo el pasado domingo. Dibujó un país que sólo existe en su imaginación y en el noticiero del canal del PSUV, antes VTV. Dijo que en algunos años íbamos a alimentar a todos los habitantes del planeta, cuando el país come a punta de alimentos producidos en otras latitudes.
Tal como lo anunció al presentar su memoria y cuento, repitió que Venezuela se convertirá en una potencia. De ilusión también se vive, dice el refrán, pero eso no puede durar toda la vida. La gente se cansa de tantos planes que no llegan a nada.
Entre la profusión de palabras Esteban se traslada a la época de la guerra de Independencia. Da la impresión de que se cree la reencarnación de alguno de los héroes que derrotaron al imperio español. Así como José Antonio Páez es el malo de su «película», José Félix Ribas es uno de sus favoritos.
La batalla de La Victoria la ha contado de diferentes formas, siempre le agrega o le quita algo, como si hubiera estado presente en esa población en aquellos sangrientos momentos. No podía faltar en su cháchara la frase que se le atribuye a Ribas, pero en esta ocasión dio una nueva versión.
En otras oportunidades el propio Esteban había asegurado que el general independentista afirmó que «no podemos optar entre vencer o morir, necesario es vencer». Pero el pasado domingo su versión fue «no podemos optar entre vencer….y otra alternativa, necesario es vencer».
Como se ve, y a pesar de que, según sus propias palabras, el cáncer que padecía fue derrotado, por si acaso la palabra muerte sigue borrada en el léxico del chacumbelato. No sólo desapareció de las proclamas oficiales del gobierno o del PSUV, sino que la censura alcanzó hasta al general Ribas. El miedo es libre.
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