Fedeindustria y Conindustria tienen opiniones encontradas sobre la ley antibloqueo
Analistas creen que la ley antibloqueo es un intento de Maduro de darle un marco jurídico a sus negocios con empresas de países aliados, principalmente Turquía e Irán, en los sectores estratégicos petróleo y oro a nivel confidencial y en la oscuridad, además de una forma de otorgarse poderes extraordinarios
Fedeindustria y Conindustria no tienen la misma opinión sobre la ley antibloqueo, aprobada por la oficialista e impuesta asamblea constituyente el pasado jueves 8 de octubre, ni de su alcance.
Mientras el primer gremio afirma que la norma, que le otorga poderes extraordinarios a Nicolás Maduro para seguir desarrollando negocios con países aliados por debajo de la mesa, tendrá «una incidencia positiva en el desarrollo de la pequeña y mediana industria del país», Conindustria sostiene que no genera la confianza que se necesita para que empresas privadas puedan invertir ni para atraer capital extranjero.
«Los recursos que recupere la nación podrán ser invertidos en el salario de los trabajadores, pero también la pequeña y mediana empresa puede ser objeto de financiamiento para capital de trabajo, reponer inventarios y mejorar la actividad económica que viene muy golpeada por las medidas coercitivas», dijo al periodista Eduardo Rodríguez el empresario Orlando Camacho, presidente de Fedeindustria.
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Por el contrario, el primer vicepresidente de la Confederación de Industriales de Venezuela (Conindustria), Francisco Acevedo, dijo a TalCual que la ley no va a incentivar a que las empresas extranjeras ni las compañías privadas nacionales vayan a invertir, debido a que fue aprobada por un gobierno que no genera confianza. «Para nada creo que las empresas se sientan motivadas a invertir. El problema no es la ley, sino el gobierno. No importa cuántas leyes tengamos, no habrá inversión mientras siga este gobierno».
«No traerá capital extranjero ni nacional, sino de la misma gente que se siente cómoda con este gobierno. Simplemente es un piso para sentir que le dieron legalidad a una cantidad de cosas que quieren hacer con sus inversionistas, pues no vendrá nadie que no sea de sus aliados».
Analistas creen que la ley antibloqueo es un intento de Nicolás Maduro de darle un marco jurídico a sus negocios con empresas de países aliados, principalmente Turquía e Irán, en los sectores estratégicos petróleo y oro a nivel confidencial y en la oscuridad, además de una forma de otorgarse poderes extraordinarios.