Hospitales han pasado al menos cuatro horas sin luz durante primeros meses de 2022
Para 2020, el promedio de horas sin luz a la semana en los hospitales fue de siete. «Este registro evidencia que a pesar de que los cortes de energía ya no son tan largos como en la crisis de 2019, sí son con mucha frecuencia y en muchos estados, incluso se registran cortes de poca duración, pero varias veces al día», dice la ONG Médicos por la Salud
La Encuesta Nacional de Hospitales (ENH), una iniciativa de la ONG Médicos por la Salud, registró que para los primeros meses de 2022, en promedio en todo el país, los hospitales pasan cuatro horas a la semana sin servicio eléctrico.
Entre enero y febrero, 8% de los hospitales reportaron tener planta eléctrica instalada pero no operativa, lo que entorpece la atención que los centros públicos de salud puedan brindar.
Durante los primeros meses de 2022, en promedio en todo el país, los hospitales pasan 4, 3 horas a la semana sin servicio eléctrico.#ENH22 pic.twitter.com/8hVyyLz1gd
— Médicos Por La Salud (@medicosxlasalud) March 30, 2022
Para el cierre del año 2019, la ENH registró que el promedio de horas que los hospitales de Venezuela pasaron sin luz a la semana fue de cuatro horas. A pesar de que durante los meses de marzo y abril de 2019 fueron los grandes apagones nacionales, los resultados de nuestro monitoreo indican que durante el resto del año y en todo el país hubo esfuerzos para que los cortes no fueran tan prolongados.
*Lea también: INVESTIGACIÓN ARI | La inseguridad se enquista en los hospitales de Venezuela
Para 2020, el promedio de horas sin luz a la semana fue de siete. «Este registro evidencia que a pesar de que los cortes de energía ya no son tan largos como en la crisis de 2019, sí son con mucha frecuencia y en muchos estados, incluso se registran cortes de poca duración, pero varias veces al día».
A partir de la crisis eléctrica de 2019, la ENH también monitoreó la cantidad de fallecidos que pudieran ser atribuibles a los cortes de luz: En 2019 fallecieron 17 personas en estas circunstancias, en 2020 fueron 75, y para el cierre de 2021 contabilizaron 141.
«Un hospital sometido a cortes de luz pone en peligro a pacientes dependientes de asistencia respiratoria, por ejemplo, o limita la movilidad de los pacientes y el personal por las áreas del hospital en el caso, por ejemplo, de que los ascensores dejen de funcionar. ¿Cómo se traslada un paciente que requiere una intervención quirúrgica de emergencia hasta el quirófano cuando el ascensor no funciona?», destacó Médicos por la Salud.
Hospitales no tan secos
1,2% de los hospitales hasta mediados de marzo reportó no haber tenido suministro de agua ningún día y 21% reportó intermitencia, siendo los estados más afectados Vargas, Barinas y Portuguesa.
Los centros de salud públicos en estas tres entidades reportaron 100% de intermitencia, es decir, que el suministro no depende de ningún horario pre establecido, por lo que no hay manera de que el hospital planifique ciertas actividades dependientes del servicio de agua, pues no saben cuando va a llegar.
El 1,2% de los hospitales monitoreados no cuentan con servicio de agua potable, mientras que en el 78,4% es intermitente. pic.twitter.com/bEsYi07ra4
— Médicos Por La Salud (@medicosxlasalud) March 30, 2022
«Este aspecto es particularmente importante para los servicios de diálisis hospitalaria, los cuales necesariamente necesitan agua para que los equipos puedan funcionar. Es importante recordar también la importancia que esto tiene para pacientes renales agudos, es decir, que necesitan el tratamiento de emergencia y no es programado como con los pacientes crónicos», recordó Médicos por la Salud.
Los hospitales que reportaron tener agua todos los días para mediados de marzo 2022 alcanzó el 78% de los centros. Esto obedece a reparaciones de tanques y sistemas de bombeo, realizado por el Gobierno central en colaboración con organismos internacionales humanitarios.
La ONG destacó que «para que un hospital, en cualquier país del mundo, pueda ofrecer un servicio de calidad a sus pacientes, debe tenerlo todo disponible para ellos pues los retrasos de incluso segundos en la atención pueden ser vitales para los pacientes».