La Academia Avión Combat enseña boxeo para la vida
La iniciativa de Wilfredo Hernández de enseñar boxeo nace de sus ganas de ayudar a que los jóvenes progresen en la vida. Es por ello que, aunque las clases de boxeo tienen un costo, no les cobra a quienes no tengan la posibilidad de pagar
Todas las tardes, en un estacionamiento situado en los alrededores de la avenida Urdaneta, se forma un ring improvisado al que asisten unos 30 jóvenes que, de lunes a viernes, se ponen sus guantes para practicar y aprender técnicas de boxeo en la academia Avión Combat, la iniciativa de Wilfredo Hernández, un artista marcial que busca ayudar a jóvenes a través del deporte para progresar y evitar «que se vayan por el mal camino».
Aunque pertenecer a la academia tiene un costo, el «máster Avión», apodo con el que fue bautizado Hernández por la altura de sus patadas, hace excepciones con quienes no tengan la posibilidad de pagar. «Lo que más me importa son las ganas que tenga de aprender», dice.
Asegura que sus estudiantes se han convertido en una familia. «El 31 de diciembre la pasamos con el máster para darle apoyo porque su hermana estaba enferma y no queríamos que se sintiera solo», cuenta Daermis Da Fonseca, una de las alumnas.
Da Fonseca es la única mujer de la academia. Las ganas de practicar se las debe a su hermano, quien también es alumno allí.
Pese a que al principio recibió comentarios negativos que señalaban que «el boxeo no es para mujeres», no prestó atención y enseñó que en el cuadrilátero no importa el género.
Resalta que para ella el boxeo es una pasión que la motiva y ayuda a afrontar otros aspectos de su vida. «Muchos no creían en mí y yo quería demostrarles que sí tenía la capacidad. Hoy en día he sido campeona nacional y estadal», expresa con orgullo.
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«Todos somos campeones»
El confinamiento por la covid-19 le sirvió a Jonathan Vásquez, de 26 años, para despertar sus ganas de practicar boxeo. «Veía las peleas de la UFC y me llamó mucho la atención», recuerda.
Desde que descubrió la academia, en octubre de 2020, no se pierde ningún entrenamiento. Su constancia lo ha llevado a ganar cinco peleas amateur. Actualmente no ve su futuro sin el boxeo. «Aquí he aprendido todo lo que soy», dice.
Vásquez afirma que gracias a sus compañeros perfecciona cada día sus técnicas, pues «nadie se cree más que el otro. El hecho de estar aquí, nos hace a todos campeones».
Cuenta que los lunes y jueves son de sparring, una forma de entrenamiento que permite mejorar el ritmo de pelea, resistencia y, a su vez, observar el progreso de cada peleador. Vásquez dice que los días de sparring, son sus favoritos.
Estos días (lunes y jueves) son los que menos asistencia tienen, debido a que, tal y como dicen los alumnos de la academia, «la mayoría huye porque le teme a los golpes».