La economía de la isla Margarita se hunde sin vuelos
Margarita, que depende del turismo, clama que se restablezca la conectividad con la isla, sobre todo ahora que se acerca la época navideña, históricamente la mejor temporada del año
Este jueves 12 de noviembre se cumplieron los 30 días durante los cuales el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC) restringió las operaciones aéreas en el país y ordenó el cierre de 11 aeropuertos, una medida para «brindar apoyo» en el «combate» contra la covid-19. El día anterior, el ente público extendió por tres meses el cierre de las fronteras aéreas, salvo con Irán, Turquía, México, República Dominicana y Panamá, pero no dijo nada sobre los vuelos comerciales nacionales, suspendidos desde marzo de 2020.
La compañía nacional Aerolíneas Estelar sigue a la espera de que el INAC le autorice volver a operar dentro del país y quite la suspensión a sus destinos, tanto nacionales como internacionales. «Estamos a la espera de que nos informen a partir de qué fecha vamos a iniciar nuevamente las rutas de Maracaibo, Santo Domingo del Táchira, Barquisimeto, Maturín, Cumaná, Puerto Ordaz y Porlamar», dice Karen Mediomundo, directora comercial de la compañía.
Margarita, que depende del turismo, clama que se restablezca la conectividad con la isla, sobre todo ahora que se acerca la época navideña, históricamente una de las mejores temporadas del año y en la que esperan que haya una real reanudación de actividades, muchas prácticamente paralizadas por la pandemia y las restricciones aplicadas por el gobierno de Nicolás Maduro.
«El comunicado del INAC habla de vuelos internacionales, pero no dice cuándo se reactivarán los nacionales ni cuáles aeropuertos volverán a operar. Necesitamos los vuelos, la actividad comercial de la isla es fundamentalmente el turismo. Tenemos más de ocho meses que no hemos recibido turistas, y si seguimos sin vuelos, esta situación se recrudecerá», advierte Teodoro Bellorín, presidente de la Cámara de Comercio de Nueva Esparta. «Hemos aguantado y guapeado con nuestros propios recursos, viviendo de la población local que no llega a 500.000 habitantes, cuando nuestras instalaciones tienen una capacidad para recibir a poco más de un millón de personas en temporada», agrega.
Señala que la crisis económica del estado, profundizada por la pandemia, la cuarentena y las restricciones de los vuelos, ha obligado a los comercios a reducir personal, pues no todos tienen la capacidad de poder encarar los pagos de los salarios y los tributos, tanto municipales como nacionales.
Según una encuesta realizada en octubre por el Centro de Estudios e Investigación de la Cámara de Comercio de Nueva Esparta, seis de cada 10 empresas margariteñas se han sentido inseguras (45%) y muy inseguras (15%) durante la pandemia. Además, el estudio reveló que 33% de los empresarios no podrá cumplir con los compromisos laborales de fin de año con los trabajadores, como utilidades, aguinaldos o bonos.
El sector empresarial privado de Margarita manifiesta la necesidad de rebajar o suspender temporalmente el pago de impuestos y tributos. Sin embargo, Bellorín indica que dos de los 11 municipios que tiene el estado evalúan aprobar importantes ajustes en los porcentajes que pagan los empresarios de sus ingresos brutos.
Los empresarios también esperan que el gobierno flexibilice totalmente la economía y que autorice el reinicio de los vuelos comerciales y la operación abierta de los ferris.
— Teodoro Bellorín Q. (@TeoBellorin) November 12, 2020
Bellorín asegura que el fuerte de la isla -que son principalmente hoteles, restaurantes y parques- trabaja 15 días al mes debido a que no está incluido en el esquema de flexibilización de la cuarentena por no ser considerado esencial.
«A pesar de que estos sectores están trabajando medio mes, los gastos siguen siendo los mismos», dice Bellorín, quien además asegura que desde hace meses están listos para recibir turistas en hoteles, restaurantes, parques temáticos y en tiendas en centros comerciales y avenidas, cumpliendo con el protocolo de bioseguridad que el sector ha diseñado para evitar la propagación del virus. Señala que se han reunido en varias oportunidades con las autoridades del gobierno de Maduro y que están dispuestos a seguir haciéndolo por el bien de la actividad económica del estado.
Sin embargo, una fuente del sector turismo que ha participado en reuniones con el Ejecutivo afirma que «la visión gubernamental es que este año no se podrá disfrutar del turismo en el país, pues todavía quieren controlar el tema sanitario».
«Es una maldad tres meses sin vuelos nacionales. En las regiones mucha gente quedará incomunicada y no podrá ver a sus familiares, y las regiones netamente turísticas se verán afectadas de manera muy negativa por este cierre. Pero, aun así, el gobierno considera que la práctica del turismo como tal todavía no debería ser una prioridad«.
El presidente de Fedecámaras, Ricardo Cusanno, advierte que si el Ejecutivo no autoriza la reactivación de los vuelos nacionales «la comercialización será muy precaria».
«Para todo el país es un drama no tener conectividad aérea nacional, pero para Nueva Esparta es aún más complejo. Viven principalmente del turismo y comercio. Si no entra gente a la isla, no se venden ni las empanadas en Pampatar. Urgen soluciones que sustenten los puestos de empleo», dice el dirigente gremial, quien además agrega que el Estado debería ser claro y anunciar si los vuelos serán permitidos y cuándo. «Solo con organización y de manera programada, se podrá llegar a algo favorable para todos».
Por su parte, Nicola Furnari, presidente de la Asociación Venezolana de Agencias de Viaje y Turismo (Avavit), dice que la suspensión de los vuelos nacionales es devastador y acaba con la última esperanza que tenían los empresarios de la isla de Margarita de tener algún repunte a final de año con la temporada decembrina, cuando los turistas fueran a pasar las navidades.
«Se entiende que todavía estamos con el tema de salud y la pandemia, pero también hay mucha gente que no solo necesita viajar para vacacionar, sino para reencontrarse con su familia o regresar a sus casas. Pero esto no quiere decir que la semana que viene, en 15 días o cuando se considere prudente, el INAC no haga otro dictamen en el que ajuste o actualice las medidas según como se vaya comportando el tema de salud en el país, que hemos visto que progresivamente los números han disminuido. Esto no quiere decir que hasta febrero no habrá vuelos nacionales».
Furnari aplaude que se haya incorporado un nuevo destino internacional, que es el de Panamá y por lo que la aerolínea Compañía Panameña de Aviación, Copa Airlines, reabrirá su oficina comercial en Caracas a partir del 16 de noviembre luego de dos años cerrada.
Espera que más destinos sean incorporados, lo que no considera un riesgo si se toman las medidas de bioseguridad y se solicitan las pruebas PCR previas y las que se hacen al llegar al país. «También esperamos que cada vez participe un mayor número de aerolíneas hasta poder cubrir todas las rutas entre Venezuela y los destinos internacionales que estaban operando previamente, y que se haga a través de toda la red de agencias de viaje y sus sistemas de distribución global».