La SIP enfatiza que la prensa en Cuba sufre una «represión constante»
En Cuba, la prensa sufre de una “represión constante”, el control de las telecomunicaciones y vive “el mayor éxodo de la historia”, enfatizó la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), en un informe aprobado este domingo 30 de octubre, durante la 78 Asamblea General del organismo
En Cuba, la prensa sufre de una “represión constante”, el control de las telecomunicaciones y vive “el mayor éxodo de la historia”, enfatizó la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), en un informe aprobado este domingo 30 de octubre, durante la 78 Asamblea General del organismo.
El informe registra la persecución de la que son blanco los periodistas en Cuba y objeto objeto de un constante “hostigamiento” y “amenazas” por parte de un “andamiaje represivo contra la libertad de prensa” de la dictadura que encabeza el presidente Miguel Díaz Canel.
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El informe de la SIP, según reseñó EFE, señala que este patrón contra la prensa pasa por citaciones policiales y hasta el encarcelamiento.
Asimismo, en Cuba, los reporteros que no son detenidos son objeto de “citación policial, cerco en su casa, y corte de internet”.
En ese sentido, denuncia la SIP en su informe, el arresto domiciliario sin mandato judicial “puede durar de algunas horas a varias semanas”.
Se documentó que “unos 20 reporteros, fotógrafos e ilustradores renunciaron a trabajar en la prensa independiente tras prohibírseles a seis de ellos viajar a un evento”. Se trata del caso del medio El Toque.
El Gobierno de Cuba, además, presiona a los propietarios de casas para que desalojen a sus inquilinos cuando se trata de periodistas críticos, como la fotógrafa María Lucía Expósito.
La SIP refirió el caso del periodista y activista cubano Lázaro Yuri Valle Roca, detenido desde junio de 2021, quien condenado a 5 años de prisión por los delitos de “propaganda enemiga de carácter continuado y resistencia” y se encuentra recluido a pesar de su “grave estado de salud”.
Otro aspecto del patrón cubano, referido por la SIP, son las multas elevadas a comunicadores. Ismario Rodríguez fue sancionado con 4.000 pesos (166,6 dólares) por “actividad económica ilícita, justificación para castigar a quienes hacen periodismo sin permiso”.
Pero, la represión a la prensa en Cuba también pasa por cambios en la legislación. El nuevo Código Penal, aprobado el pasado mayo y que entrará en vigor el 1 de diciembre, persigue todos los aspectos de la labor periodística, al tiempo que «castiga con prisión al autor de cualquier crítica a funcionarios estatales y garantiza impunidad a las autoridades”.
El Código contempla 10 años de cárcel por la “recepción, el uso y la posesión de fondos provenientes del extranjero”, lo que limitaría al máximo la financiación de los medios fuera de la burbuja estatal.
La SIP destaca el rol de la estatal Empresa de Telecomunicaciones de Cuba, S.A. (Etecsa). Este organismo determina que la red de internet sea “spiada y censurada” y, en muchas ocasiones, bloqueada durante hechos como las protestas antigubernamentales del 11 de junio.
«El monopolio estatal mantiene bloqueadas decenas de websites de medios de prensa independientes y de diferentes ONG relacionadas con los derechos humanos”, señala el informe.
Por otra parte, miembros acreditados en Cuba de las agencias internacionales AP, Reuters y EFE, «denunciaron limitaciones a su labor”.