Ledezma: Dialogar con Maduro es como pedir al Papa que hable con el diablo

Ledezma nuevamente aconsejó a Guaidó a que emplace a la cúpula militar a actuar «no a que dé un golpe de Estado» sino a un «acto de desagravio»
El ex alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, calificó de «candoroso» (ingenuo) por parte de la oposición venezolana volver a caer en una negociación con el mandatario Nicolás Maduro, luego de que él le «tomara la palabra» la noche del 25 de marzo al exgobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, de sentarse a negociar para salir de la crisis del país.
A juicio de Ledezma, acudir nuevamente a un encuentro con Maduro «es como si se le pidiera al Papa que se entendiera con el diablo». Además, es de la opinión de que el mandatario venezolano no tiene capacidad para tomar medidas contra la crisis generada en el país «porque él la creó».
Recalcó que con la destrucción del sistema de salud, que fue provocada durante su gestión, reaparecieron enfermedades en Venezuela como la difteria, sarampión, tuberculosis y la malaria, por lo que no se puede pensar que Maduro tiene una solución para atacar al coronavirus.
Antonio Ledezma cree que Nicolás Maduro usará el coronavirus como un «escudo» para protegerse y aprovecharse de lo que ocurre para pasar el tiempo y seguir en el poder, «pero no va poder resolver el problema del coronavirus porque él es el propio coronavirus».
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Señaló que ningún país del mundo le dará recursos económicos, hecho que se evidenció con la negativa del Fondo Monetario Internacional y que muy probablemente haga el Banco Mundial porque «Maduro no tiene legitimidad de origen ni legitimidad de desempeño porque ha sido un desastre».
Ante la solicitud hecha por la Alta Comisionada de la ONU para los DDHH, Michelle Bachelet, de flexibilizar las sanciones, el ex alcalde dijo que Maduro «es la sanción que hay que acabar», ya que hace daño su presencia en los demás poderes públicos al «usurparlo». Recordó que fue la misma Bachelet la que elaboró un informe sobre las violaciones de DDHH ocurridas en Venezuela por medio de las FAES y que además reconoce que en el país hay una crisis compleja, señaló en una nota de prensa.
En ese sentido, manifestó que el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, reconocido por más de 50 países como presidente encargado de Venezuela, debe tener claro por qué ocupa el puesto por el cual fue ratificado y no solo decir que lo ejerce. Recomendó la creación de un Fondo de Salvación Nacional con los recursos que están en bancos de EEUU y otros países para comprar comida a las personas del país.
No solo alimentos, sugiere Ledezma. Sino también medicinas, camillas y camas para equipar los hospitales, así como también «hay que comprar hasta las urnas, porque hay que tomar conciencia en eso y hay que decirlo, aunque sea doloroso, porque estamos frente a una gran tragedia».
La operación de la que es partidario es llevar la ayuda por todas las vías: aire, tierra y mar y ver si impiden la llegada de todos esos recursos al país. Cree que la situación no debe quedar en discusiones, sino en aplicar y ejecutar medidas urgentes para alimentar y sanar al pueblo. También la compra de insumos para poder pasar lo mejor posible el covid-19.
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Nuevamente aconsejó a Guaidó a que emplace a la cúpula militar a actuar, pero no para dar un golpe de Estado, sino para recuperar la institucionalidad del país, basándose en el artículo 350 de la Constitución «que dice claramente que los militares y civiles como nosotros estamos en la obligación por nuestra tradición republicana a desconocer un régimen que contraríe los valores y principios de la democracia venezolana y menoscabe los Derechos Humanos».
«Señores no van a dar un golpe de estado, sino que le van hacer un servicio a la patria. Van hacer ustedes un acto de desagravio y se van a lavar la cara para que mañana puedan ver de frente a sus hijos, a sus esposas o esposos según sea el caso», dijo.
Calificó de «toque de queda» la cuarentena decretada por Nicolás Maduro en Venezuela para frenar el avance del covid-19 en el país y que es ejecutado por el «malandraje» que está al servicio del mandatario, ya que quien no respete ese toque de queda es asesinado.
Advirtió que «cuando no sean cuatro o cinco los que salgan a la calle, sino una avalancha de gente a buscar comida», sentenció Ledezma.