Guaidó debe diferenciar la tropa del Alto Mando en su discurso a la FAN
Guaidó no puede ser endeble ni pazguato, debe presentarse en un tono más enérgico para recordar a la FAN que es una estructura descompuesta y politizada
En su avance hacia una transición democrática, el presidente de la Asamblea Nacional (AN), diputado Juan Guaidó, quien el 23 de enero se juramentó como presidente encargado de la república, busca el respaldo de los cuarteles a los que les ofrece como salvoconducto la Ley de Amnistía. Durante la ardua tarea, Guaidó insiste que recibirá con garantías a los oficiales que abracen la bandera de la constitucionalidad.
De allí se deriva el peso y la efectividad de su mensaje, el cual, según oficiales retirados y sectores de la Fuerza Armada Nacional (FAN), requiere hacer foco en desmarcar al colectivo del Alto Mando, cuyas acciones inconstitucionales han sido cuestionadas dentro y fuera del país.
“Juan Guaidó debe separar en su mensaje a la jerarquía de la masa militar. El ministro Padrino López y el Alto Mando destruyeron a la Fuerza Armada y además avalan el mandato de Nicolás Maduro, quien no tiene legitimidad de origen. Es el Alto Mando quien avala la usurpación de la Comandancia en Jefe de la FAN. Guaidó, quien desciende de familia militar, debe apelar a los valores y principios de la organización, a la decencia y el honor que priva en la mayoría de los miembros de la institución castrense”, sostuvo el general retirado Gonzalo García Ordóñez, quien fuera jefe del Comando Unificado de la Fuerza Armada.
Añadió que el diputado de Voluntad Popular tendrá eco en los cuarteles sí enfatiza que conoce de cerca la moral militar, y que los vicios e irregularidades que se han asociado a los mandos castrenses no son asumidas, de manera generalizada, por toda la organización.
Otro aspecto del discurso es recordar los privilegios de los que gozan los jefes de la FAN, “mientras la mayoría de los miembros de la institución vive las mismas precariedades que el pueblo venezolano”. Sin embargo, el general cree que una vez se superen los escollos para la transición, la situación social de los uniformados mejorará como la del resto del país.
«Guaidó no puede ser endeble ni pazguato, debe presentarse en un tono más enérgico», dice Machillanda
El coronel retirado José Machillanda, sociólogo militar, subrayó que el discurso de Guaidó debe ser determinante y clarificador. «El dirigente, como representante del poder político, debe ponerse por encima de las circunstancias y coyuntura del cuerpo armado. Guaidó no puede ser endeble ni pazguato, debe presentarse en un tono más enérgico. Hay que recordar que la FAN es una estructura descompuesta y en la que se ha impuesto la politización”.
Machillanda coincide con García Ordóñez en que un mensaje asertivo requiere enfatizar que el Alto Mando, liderado por Padrino López, “es un cuerpo podrido que atiende compromisos ideológicos”. De allí su llamado a Juan Guaidó para que insista en la exhortación a la misión constitucional de los militares, llamados a estar prestos para la defensa, conducta que será necesaria durante y después de la transición.
Al ser consultado sobre el enunciado de un hipotético mensaje de Guaidó a la institución castrense, el coronel José Machillanda esboza: “Miembros del Ejército, la Armada, de la Aviación y de la Guardia Nacional, el camino de la transición política que demanda la república, desde el 10 de enero, requiere de un componente militar organizado, disciplinado, distante de los intereses mezquinos de la política y cercanos a la responsabilidad excelsa de la república. En mi condición de presidente interino, les motivo para que se ajusten a lo establecido en la ética y a la responsabilidad del soldado para que en esta transición, que se inicia por la vía de la resistencia civil y la desobediencia al gobierno, el nuevo poder político pueda enjuiciar a quienes en los más importantes grados de la organización se han ocupado de pervertir y desviar al cuerpo militar”.
Para Machillanda la oferta de Guaidó sobre la Ley de Amnistía, que ampararía a miembros del sector castrense, debe verse con cuidado por cuanto no es procedente para amparar los delitos y las violaciones a la Constitución “por parte de los vagabundos del cuerpo armado”.
Sin incitaciones
El general retirado Juan Antonio Herrera Betancourt puntualiza que el discurso transmitido hasta ahora por Juan Guaidó no debe considerarse como un llamado a subvertir los cuarteles, una evidencia del delito de incitación a la rebelión o un golpe de Estado. El militar señala que el también presidente de la Asamblea Nacional (AN) será oído en las unidades castrenses si llama a la legalidad en el accionar de la FAN.
“Guaidó debe exhortar además a la unión de la organización castrense y enfatizar que el proceso hacia la transición es irreversible. El mensaje debe incluir, como ya lo ha asomado, que no puede haber más baño de sangre y el maltrato a quienes son llevados a prisión por protestar. Es importante que el discurso recuerde el respaldo de la comunidad internacional al proceso iniciado por el cambio en Venezuela”
Herrera Betancourt agregó que Juan Guaidó tendrá mayor impacto mientras más directo sea hacia los cuarteles y una vez explique las garantías concretas que obtendrían los militares que se acojan a la amnistía. Luego de su juramentación, el miércoles 23 de enero, el presidente del Parlamento ha insistido en que son bienvenidos todos los efectivos de la FAN que decidan asumir el camino constitucional.
Destacó que la institución castrense constituye un actor crucial no solo para girar el timón de la transición: lo es también para el proceso de reinstitucionalización del Estado en la siguiente fase de los cambios que urgen al país.
Mensaje patriótico
Militares de los cuadros medios de la FAN aseveran que el discurso de Guaidó está obligado a ser cercano con los miembros de la organización a la que el gobernante Nicolás Maduro ha visitado varias veces desde el 23 de enero.
“El mensaje de Guaidó no debe ser imponente, pero sí una mezcla de reflexivo, solidario, concientizador, patriótico, bastante apegado al marco legal, pero que quede claro que exige una determinada conducta. Además es importante demostrar que nos conoce a fondo”, planteó un capitán que por razones obvias, prefiere no revelar su identidad.
Añaden otros oficiales, cuyas identidades también piden ser resguardadas, que el dirigente de VP tiene el reto de recordar las funciones constitucionales asignadas a la Fuerza Armada en el artículo 328 y enfatizar que el artículo 350, sobre el desconocimiento a cualquier régimen que contraríe los principios democráticos, también atañe a los militares.
Creen las fuentes castrenses que Juan Guaidó también tiene que hablar del hambre que aseguran se padece en los cuarteles y en los hogares castrenses, así como las precariedades que vive los militares durante el desempeño de su servicio profesional. Estos últimos aspectos han sido puestos de manifiesto en los recientes pronunciamientos de miembros del componente Guardia Nacional.
Enfatizan que un aspecto difícil de erradicar de las unidades uniformadas es el adoctrinamiento sobre el hecho de que los opositores a la revolución son “vende patria”. Asimismo, insisten en que los llamados a marcar distancia kilométrica de los mandos, “porque hay muchos de nosotros que jamás reprimió a nadie o que jamás votó por Chávez”.